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Carlos Acosta, el bailarín que salió de las calles cubanas a los más grandes escenarios del mundo

FARÁNDULA

Carlos Acosta, el bailarín que salió de las calles cubanas a los más grandes escenarios del mundo

Su pasión por el baile despertó después de presenciar una actuación del Ballet Nacional de Cuba

Carlos Acosta-biografía

El cubano ha dejado su huella en los más grandes escenarios del mundo. (Captura de pantalla: Royal Opera House – YouTube)

Carlos Acosta nació en La Habana, Cuba, el 2 de junio de 1973. Criado en el humilde barrio de ‘Los Pinos’, pasaba su tiempo jugando en la calle, soñando con ser futbolista y bailando breakdance.

Para alejarlo de las calles, su padre lo inscribió en la Escuela Nacional de Ballet de Cuba cuando tenía apenas nueve años. Su adaptación fue complicada y, debido a los problemas que generaba, fue enviado a un internado en Pinar del Río.

La pasión por el baile despertó en Acosta a los 13 años después de presenciar una actuación del Ballet Nacional de Cuba. Regresó a la Escuela Nacional de Ballet, donde fue alumno de Ramona de Saa, prestigiosa pedagoga y discípula de Alicia Alonso. Su habilidad y técnica mejoraron rápidamente, y a los 16 años obtuvo una beca para el Ballet de Turín. Se graduó de la Escuela en 1991 con las máximas calificaciones.

Su carrera como bailarín es ampliamente destacable. Ha bailado para diversas compañías de ballet de prestigio en todo el mundo.

Entre 1989 y 1991, fue parte de la Compagnia Teatro Nuovo di Torino, en Italia, donde tuvo la oportunidad de danzar con Luciana Savignano. Durante este período, también participó en la Compañía del Teatro Carreño de Caracas.

De 1991 a 1992, se unió al English National Ballet de Londres, donde interpretó obras como Las Sylphides, El Espectro de la Rosa, Cenicienta, El Príncipe Igor y Cascanueces.

Entre 1992 y 1993, Acosta regresó a su país natal para unirse al Ballet Nacional de Cuba bajo la dirección de Alicia Alonso. En 1994, se convirtió en el primer bailarín de la compañía. Ese mismo año, debutó en Madrid con interpretaciones de El Lago de los Cisnes, Don Quijote y Giselle. También tuvo la oportunidad de debutar en el mítico Teatro Bolshoi, donde interpretó El Corsario.

A finales de 1993, Ben Stevenson, director artístico del Ballet de Houston, lo invitó a unirse a su compañía. Como primer bailarín, interpretó obras como Don Quijote, La Bayadère y El Lago de los Cisnes. También actuó de manera esporádica en el American Ballet Theatre.

En 1998, se convirtió en el primer bailarín del Royal Ballet de Londres, donde bajo la dirección de Carlos Christ, interpretó El Lago de los Cisnes y Raimonda. Su última actuación con ellos fue en 2015 en Carmen, coreografiada por él mismo.

Desde 2015, se ha dedicado a impulsar su fundación en apoyo a jóvenes talentos, a través de su academia y cuerpo de baile, bajo el nombre Acosta Danza, con sede en Cuba. El laureado bailarín ha expresado su deseo de que la compañía mantenga las bases del ballet clásico, pero con las innovaciones necesarias para liderar el siglo XXI.

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