Carlos Massola bajo constante asedio mientras espera el parole: “Me están vigilando”

Massola espera en su casa en La Habana, bajo vigilancia del régimen, la aprobación del parole humanitario que sus familiares presentaron en su favor. (Captura de pantalla © NoticiasCubanet Cuba – YouTube)

Desde el pasado 2 de septiembre de 2023, familiares del actor cubano Carlos Massola solicitaron el parole humanitario de Estados Unidos en favor del artista, quien reside en Cuba bajo una constante tensión durante los últimos tiempos, a consecuencia de su postura frontal contra los crímenes que comete el régimen castrista.

“El parole me lo puso la esposa de mi primo, que ellos viven en Los Ángeles. Ella es norteamericana”, explica Massola en entrevista con Periódico Cubano.

Mientras su caso aún está a la espera de ser aprobado por las autoridades estadounidenses, el cubano sufre represión política, que no solo ha implicado el cierre de todas las puertas para ejercer su profesión en el país; sino también una constante vigilancia en su hogar, en aras de que cometa algún “acto de rebeldía” para tomar mayores represalias en su contra, asegura.

“A mí me están vigilando. Me ponen a una muchacha policía allá abajo, y a veces a otro muchacho joven, que viene y se sienta ahí”, declaró a nuestra redacción.

El actor compartió a nuestro medio imágenes tomadas desde su casa en las que se ve a una mujer policía y otras personas que fungen como vigilantes del régimen. (Foto © Cortesía de Carlos Massola)

“Me quitaron del trabajo totalmente, ya no puedo trabajar aquí en nada. A no ser que fuera una película independiente que el director quiera ponerme; pero nada auspiciado por el Estado, me quitaron totalmente de eso”, sostiene.

Las críticas que el actor ha emitido en contra del gobierno cubano le han valido esta censura. “Ya no me dan trabajo, me han quitado trabajo. Lo último que hice fue un programa de Vivir del Cuento, gracias al director y a Luis Silva ‘Pánfilo’, que me llamaron a trabajar, aunque ya yo estaba virado contra esto, pero fueron honestos y buenas personas. Ahora, con estas últimas declaraciones que estoy haciendo, ya sé que ellos no me van a llamar más, ni me pueden llamar más, porque se perjudican, es lógico, esta es una sociedad que excluye, no como ellos dicen que son inclusivos”, refirió a nuestro medio en una entrevista pasada.

En aquella conversación, expresaba su preocupación por “el miedo que se ha apoderado de los cubanos”, que temen alzar su voz y denunciar los atropellos que a diario viven por temor a la represión del gobierno, que cuenta con una amplia maquinaria con la que ejerce control sobre gran parte de la ciudadanía.

Mientras continúa esperando por la aprobación de su caso de parole humanitario, Carlos Massola es un ejemplo de la valentía de no callarse, desde dentro de la propia Cuba, ante las injusticias, y de las consecuencias que el simple hecho de expresar tu opinión tiene en un país sometido a dictadura.