Rompe el silencio colega del médico cubano fallecido en París

Una colega del médico cubano que fue expulsado de la misión en Mauritania y murió de dos infartos en el baño de un aeropuerto en París, alzó la voz y reveló las duras condiciones bajo las que trabajan los que integran la misión médica instalada al noroeste de África.

De acuerdo a una publicación de 14 y medio, la enfermera que trabajó al lado de Obana envió una carta en la que relata cómo trabajan los 60 cubanos en la misión.

En la carta revela que sus colegas deben realizar turnos de 24 horas de trabajo, con descansos de 24 horas, acumulando al mes 360 horas, 168 horas más que las establecidas en cualquier convenio internacional, sin la oportunidad de cobrar horas extra.

Los médicos cubanos no tienen derecho a vacaciones pagadas y en caso de tener que regresar a Cuba, el régimen no contribuye con el boleto, que puede llegar a costar lo que equivale a dos meses de salario.

La enfermera opina que es lamentable que deportistas y artistas reciban más ingresos que quienes se dedican a salvar vidas.

De acuerdo con los compañeros que continúan en la misión, a sus colegas se les disminuirán $300 de su paga, a partir de septiembre.

“Se les dijo que el que no esté de acuerdo con la reducción del salario que se vaya para Cuba a seguir ganándose sus 60 CUC por mes, y que el que no quiera continuar en la misión por esa causa tiene que pagarse el pasaje de regreso, ¡que burla!”, mencionó la nota.

A los médicos se les retira el pasaporte azul, la enfermera cuenta que estuvo más de un año indocumentada en ese país.

La enfermera hace hincapié en la jefa de la misión, a quien describe en la carta como un persona déspota, carente de ética y temida por los colaboradores por su constante uso de amenazas y chantajes.

Según la carta, la dirección de colaboración en Cuba está al tanto de esto y les conviene tener a una “tirana” a cargo, manteniendo el orden mediante el miedo.

Juan Manuel Obana Borges, médico cubano recién expulsado de una misión en Mauritania, falleció el 11 de septiembre en el baño del aeropuerto Charles de Gaulle, de París.

Obana sufrió dos infartos, de acuerdo con testimonios de sus familiares, el médico trabajó mucho tiempo sometido a situaciones extremas de estrés, tuvo discrepancias con la jefa de dirección y terminó siendo enviado a París, donde iba a solicitar asilo.