Cuba con severa escasez, pero con periódicos a color

Con severa escasez en Cuba, pero con periódicos a color. (Collage ilustrativo: CentroVisión Yayabo-Facebook y Naturaleza Secreta-Facebook)

El gobierno de Cuba anunció que sus periódicos impresos en el poligráfico de Santa Clara ahora saldrán a cuatro colores, un avance tecnológico innecesario y costoso en medio de la peor crisis económica que ha enfrentado la Isla desde 1990.

Mientras los cubanos tienen que formarse por horas y a veces desde la madrugada para conseguir un poco de comida, las autoridades priorizaron la adquisición de una imprenta a color y todos sus suplementos.

Los productores de la Isla permanecen sin materias primas tan simples como los fertilizantes y el propio gobierno obstaculiza su labor no recogiendo sus cargas a tiempo o quedándoselas a deber.

Aunque se ha comprobado que Cuba importa alimentos, incluso desde EEUU, el régimen no se decide a importar lo suficiente para satisfacer la demanda de productos básicos como pollo, arroz o frijoles.

En este contexto de desabasto, el Gobierno celebra el proceso de “reconversión tecnológica para la producción de la prensa” con la implementación de nuevos equipos y operaciones ahora en el Poligráfico de Santa Clara, en Villa Clara.

El poligráfico es el mismo en el que se registró uno de los brotes de coronavirus más importantes, que se extendió a otras dos empresas.

Ahora, los habitantes de las provincias de Ciego de Ávila, Sancti Spíritus, Villa Clara y Cienfuegos, podrán leer los periódicos que circularán en formato a color mientras esperan horas para comprar una barra de jabón o un poco de pasta dental.

La crisis de productos de higiene continúa, sin solución pronta posible. Incluso los extranjeros que se encuentran aún en la Isla han denunciado también la falta de toallas sanitarias y desodorante.

“El poligráfico ya está en condiciones de asimilar una carga superior”, informó el oficialista Cubadebate, que añadió que también se “modernizará” el poligráfico de La Habana.

Ni siquiera con el evento de contagio en el centro laboral de Santa Clara, que afectó al menos a otras tres empresas en la zona, se dejaron de imprimir los periódicos oficialistas. Los trabajadores en cuarentena dormían alrededor de las máquinas con sus familiares, también en aislamiento dentro del edificio.

Esto, sumado a la modernización del mismo medio, que se realiza cuando en Cuba falta hasta el agua potable, dejan claro que la prioridad del gobierno cubano no es proveer, sino adoctrinar.