Cuba se despide del Cardenal Ortega en una misa con Exequias

Una conmovedora misa con exequias en las que se hicieron presentes diversas autoridades políticas y religiosas, fue la manera en la que se le dio el último adiós al arzobispo emérito de La Habana, el cardenal Jorge Ortega Alamino.

La celebración litúrgica estuvo presidida por monseñor Juan de la Caridad García, actual arzobispo de La Habana; quien a través de sus palabras a lo largo de este encuentro de fe resaltó las cualidades humanas y cristianas de Ortega, asegurando que el hombre que dejó la tierra el pasado viernes 26 de julio era instrumento de luz y salvación.

El velorio del cardenal se llevó a cabo durante los últimos tres días; y para él se dispuso que este siervo de Dios portara la vestimenta propia del cargo eclesiástico que desenvolvió en vida.

La misa exequial se realizó en la catedral de la capital cubana; y en ella se hicieron presentes personalidades políticas como el primer vicepresidente de Cuba, Salvador Valdés, el presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular Esteban Lazo, y el vicepresidente Roberto Morales; además del primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Raúl Castro, y el presidente Miguel Díaz-Canel, estos últimos se encargaron de adornar el templo con arreglos florales dándoles un estilo barroco.

Además, obispos, sacerdotes, feligreses e invitados nacionales y foráneos, también se hicieron presentes para despedir a este hombre de Dios.

En un momento de la celebración se dio lectura al comunicado que el papa Francisco hizo llegar a la iglesia cubana; por medio del cual ofreció sus condolencias y transmitió su bendición apostólica como “signo de esperanza” en un Dios resucitado.

Al finalizar la ceremonia los restos de Jaime Ortega fueron trasladados a la Necrópolis de Colón en un cortejo fúnebre.

El panteón de los obispos es el lugar donde se le dio sepultura a los restos del cardenal.

Jaime Ortega, nació en Matanzas el 18 de octubre de 1936; en sus años de pastoral se desenvolvió como presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba y fue anfitrión de la visita a la isla de los tres últimos papas: Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco.

Además, por medio de sus acciones como mediador entre la iglesia, el gobierno cubano y el estadounidense, logró propiciar el restablecimiento de las relaciones entre estos dos países.

Tras una dura batalla contra el cáncer, el cardenal pidió su baja en el 2016, y se despidió de este mundo el pasado viernes 26 de julio dejando con su vida un testimonio de fe y servicio a Dios.

Con Información de CubaSí