Cubano es detenido por múltiples delitos cometidos en Miami Lakes

El cubano Félix Rodríguez Álvarez, de 38 años, es sospechoso de haber cometido múltiples delitos graves en el vecindario Liberty de Miami Lakes, durante la noche del pasado jueves.

Según un reporte policial compartido por Local 10, el antillano enfrenta cargos por robo, secuestro y abuso contra una mujer, con quien fijó un encuentro en la dirección West Buena Vista Park, ubicado en 1199 NW 45th St., a través de una página web.

Una vez que se encontraron en Miami Lakes, Rodríguez Álvarez sacó un arma y exigió 200 dólares a la víctima. La razón detrás de esta violenta solicitud parecía ser un desacuerdo sobre el pago. La mujer, incapaz de entregar la cantidad en ese momento, se vio obligada a llamar a una amiga para que trajera el dinero.

A pesar de que la amiga llegó con el monto exigido y se lo entregó a Rodríguez Álvarez, este decidió mantener a la víctima dentro de un vehículo en contra de su voluntad y la amenazó con un arma de fuego.

La situación se volvió aún más aterradora cuando le exigió a la primera mujer tener relaciones bajo amenazas. El hombre procedió a este acto y luego la abandonó a unas cuadras de distancia mientras huía a bordo de un vehículo.

Rodríguez Álvarez continuó amenazándola a través de mensajes de texto, advirtiéndole de graves consecuencias si tomaba medidas legales contra él. Tras una denuncia, la policía permitió triangular el número de teléfono celular del agresor, lo que condujo a su arresto en su apartamento en Balgowan Road.

En el momento de la detención, se le encontró en posesión de una pistola Smith & Wesson de 9 milímetros y una pistola de aire comprimido, ambas utilizadas en el crimen.

El sospechoso también enfrenta cargos por encarcelamiento ilegal con un arma mortal y uso de un arma de fuego en la comisión de un delito grave. El juez determinó que permanezca detenido sin derecho a fianza en la cárcel.

Si el antillano es encontrado culpable por el delito de abuso, podría recibir una sentencia de 10 a 30 años de prisión y una multa de hasta 250.000 dólares. Por el secuestro, la sanción sería de 20 años de cárcel a cadena perpetua.