De la pobreza en Cuba a jefe de la Marina de EEUU: la inspiradora historia de Ana Marrerosuarez

Ana Marrerosuarez es parte de la tripulación del USS Gerald R. Ford. (Captura de pantalla © RTC Public Affairs – YouTube)

Después de 15 años de residencia en Estados Unidos, la cubana Ana Marrerosuarez ostenta el rango de suboficial en jefe en la Marina de ese país. Su historia fue compartida en la página web del Departamento de Defensa para destacar su liderazgo y el esfuerzo realizado para alcanzar ese puesto.

Según la antillana, su éxito se arraiga en el trabajo duro y la disciplina, valores que le inculcaron mientras crecía en medio de las condiciones de pobreza que enfrentaba en la Isla, hasta que emigró a los 19 años, en 2008, para reencontrarse con el resto de su familia en Miami.

“Crecí en un país muy pobre, no tenía comida muchos días al mes y tampoco ropa”, comentó Marrerosuarez en el reportaje escrito por el suboficial de tercera clase de la Marina, Aaron Arroyo.

La joven también mencionó que ve a su madre como su mayor heroína por la educación que le dio cuando enfrentaban momentos difíciles en Cuba. “Ella solía decirme que puedo lograr cualquier cosa que quiera, que no hay imposibilidades y que las únicas barreras están en mi mente. Mientras tengas una actitud positiva, puedes ir a donde quieras y todos lo harán”, agregó.

Dos años después de llegar a dicha ciudad del sur de Florida, se unió a la Marina sin poder hablar inglés, pero con el objetivo de aprender el idioma. “Sabía que, si me quedaba en Miami, no podría aprender el idioma como quería porque todos hablaban español”, relató.

La suboficial relató que en sus primeros días en el campo de entrenamiento se la pasaba observando lo que hacían los demás reclutas para comprender las tareas ordenadas en inglés.

Siete años después de graduarse de ese campo, asumió el rango de Recluta Comandante de División y, como hablaba español con fluidez, actuó como “un salvavidas” para jóvenes que aún no sabían hablar el idioma.

Marrerosuarez continuó con un paso ascendente en la marina estadounidense hasta llegar al USS Gerald R. Ford, donde ha cumplido dos años como parte de la tripulación y fue elegida para unirse a las filas del liderazgo alistado superior como suboficial en jefe.

“A veces miro hacia atrás y pienso que es una locura cómo hace 15 años vivía en un país donde no podía expresar mis ideas, donde no tenía comida ni ropa. Ahora soy jefe de la Marina de los Estados Unidos. Me siento muy orgullosa de eso y de lo lejos que he llegado, de la nada a un líder, de poder inspirar y ayudar a otras personas que tienen antecedentes similares”, comentó.

Asimismo, añadió que enseña a sus subalternos a dar el 100% en el trabajo, y cuando, estén en casa, siempre demostrar un apoyo emocional y físico con sus seres queridos, porque ellos son el mayor sistema de apoyo.