Asesinó a su propio padre para heredar una gran fortuna

Un empresario canadiense conocido como Wayne Millard murió en 2012, y por tanto su hijo heredó la compañía familiar, MillardAir. Tuvieron que pasar seis años de investigación para que la Corte Superior de Ontario encontrase al culpable del deceso de Millard: su propio hijo.

Dellen Millard, de 33 años, había dicho que su padre se suicidó producto de una grave depresión que le aquejaba, incluso llegó a declarar a las autoridades que su progenitor “llevó una gran tristeza con él durante toda la vida que yo nunca supe, nunca quiso compartir eso conmigo». También había declarado que este era un alcohólico.

El juez de la Corte, Maureen Forestell señaló que el asesinato fue “planeado y deliberado”, y sentenció que el disparo que recibió Wayne Millard fue producido por su hijo.

El joven canadiense ya se encontraba en prisión cumpliendo dos cadenas perpetuas porque ya había sido declarado culpable de otros dos asesinatos.

En julio del 2012 desapareció la novia de Dellen, Laura Babcock, y en el 2017 fue encontrado culpable de asesinato junto a su amigo Mark Smich. La conclusión del jurado fue que la mató para liberarse de un triángulo amoroso.

De igual manera, Dellen Millard y Mark Smich fueron hallados culpables de la muerte de Tim Bosma, que ocurrió en mayo del 2013. Los tres no se conocían, pero se reunieron, ya que Bosma había puesto a la venta una camioneta que le interesó al par de amigos.

De esta reunión, Bosma no regresó a su casa, por lo que su esposa denunció la desaparición de su marido y tiempo después sus restos fueron encontrados incinerados en una granja de la familia Millard.

Tras la sentencia sobre el asesinato de Wayne Millard, el padre de Laura Babcock declaró a la CBC: “Se ha demostrado que no sólo los Bosma y nosotros perdimos a un ser querido. La familia Millard debe vivir con el hecho de que este atroz individuo asesinó a su propio padre».

Con información de BBC News