Detienen al sospechoso del atropello que causó la muerte de un cubano en La Pequeña Habana

Víctor Manuel Rubio podría recibir hasta 30 años de cárcel por abandonar la escena de un accidente. (Foto © Archivos del condado de Miami-Dade)

Una semana después del trágico atropello y fuga que cobró la vida de un padre cubano llamado Tomás Brito en La Pequeña Habana, las autoridades reportaron la detención de un conductor sospechoso en este caso.

Según Local 10, el chofer bajo investigación es conocido con el nombre de Víctor Manuel Rubio, de 33 años, quien cuenta con un amplio historial de casos delictivos, inclusive se encontraba en libertad condicional cuando sucedieron los hechos.

El accidente tuvo lugar poco antes de las 8:40 p.m. del domingo pasado en el área del suroeste de la Calle Ocho y la Octava Avenida. Según el informe policial, Rubio conducía a gran velocidad por la Calle Ocho en un BMW dorado cuando atropelló a Brito, de 40 años, quien cruzaba la calle a mitad de cuadra.

Tras el impacto, la víctima fue trasladada a un hospital cercano, donde finalmente perdió la vida a causa de las lesiones. Respecto al conductor, las investigaciones señalan que huyó de la escena con las luces del vehículo apagadas y lo estacionó a las afueras de una casa.

Al día siguiente, las autoridades encontraron el BMW gravemente dañado y abandonado, con evidencias de sangre y cabello incrustado en su superficie. Un vecino proporcionó información crucial a la policía, identificando a Rubio como el sospechoso que había sido visto en el área esa noche.

A las declaraciones del vecino se le suman las de un testigo que se encontraba a bordo del automóvil involucrado. Según el informe policial, esta persona declaró que Rubio ignoró sus súplicas de reducir la velocidad antes del impacto y posteriormente se negó a detenerse tras el accidente fatal.

El detenido también habría intentado desvincularse del incidente, solicitando que se denunciara el robo del vehículo, en lugar de reportarse un accidente a las autoridades. Sin embargo, el testigo se negó a colaborar con ese plan y decidió alejarse.

El sospechoso cuenta con un historial de condenas por venta de drogas, robo y abuso infantil agravado. Su nuevo arresto ocurrió en su residencia en el vecindario Flagami por ser presunto responsable de cargos por abandonar la escena de un accidente que resultó en muerte.

En este tipo de casos, los conductores pueden enfrentar acusaciones de un delito de primer grado, lo que conlleva hasta 30 años de privación de la libertad, multas de hasta 10.000 dólares y la revocación de la licencia de conducir por al menos tres años.