Díaz-Canel sobre la nueva ley de medios: “Tiene un enfoque preventivo ante la subversión”

En abril de 2018, Díaz-Canel fue seleccionado por Raúl Castro, pues según sus propias palabras, fue el único sobreviviente de un grupo que él y Fidel Castro comenzaron a preparar para la sucesión de poder. (Captura de pantalla: Canal Caribe – YouTube)

Después de las revisiones que tuvieron lugar en el VI Pleno del Comité Central del Partido Comunista (PCC), se dio la orden a la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) para que se aprobara la Ley de Comunicación Social de Cuba. La misma busca afianzar el control del régimen comunista sobre los medios de comunicación, y crea herramientas para castigar a la prensa independiente y las publicaciones en redes sociales que no le son afines.

Sobre el tema, el mandatario designado Miguel Díaz-Canel confesó que el texto de la normativa “tiene un enfoque preventivo ante la subversión”. Lo anterior, es la manera eufemística de decir que el gobierno comunista irá a una cacería de bruja contra aquellos que no se dobleguen a reproducir el discurso oficialista apegado a la forma y fondo que se ordenan desde el Comité Ideológico del PCC.

Por ejemplo, entre los articulados de amplio espectro, y totalmente discrecional de la ley, destaca la prohibición total de divulgar informaciones que puedan “desestabilizar el Estado socialista”.

Para afianzar este punto, desde el portal oficialista Cubadebate se dijo que para la redacción de la ley los “expertos” tuvieron en cuenta que el 80% de las comunidades digitales están en plataformas estadounidenses, en referencia a Facebook y Twitter. Por lo tanto, en esencia también es un asunto de “seguridad nacional” para Cuba.

De ahí que el propio Díaz-Canel reconozca que la normativa tiene un enfoque “regulatorio”, porque “el largo período de confrontación y la agresividad que caracteriza la criminal política del gobierno estadounidense impacta en todos los ámbitos de la sociedad cubana y, de manera particular, en lo comunicacional”.

El presidente del Instituto de Comunicación e Información Social –antiguo ICRT–, Alfonso Noya Martínez, argumentó que la ley llega en un momento donde es necesario “afianzar la ideología de nuestra sociedad socialista y defender la independencia, soberanía y seguridad de la patria; siendo un aporte de mayor trascendencia en el escenario de guerra política, ideológica, económica, comunicacional y cultural que enfrenta la Revolución cubana”.

Durante el año 2022, el Instituto Cubano por la Libertad de Expresión y Prensa (ICLEP) recopiló datos alarmantes: al menos 508 agresiones fueron cometidas contra periodistas. La represión a la libertad de expresión y prensa se ha institucionalizado en la Isla, y el Estado comunista se ha convertido en el principal perpetrador de estos actos de violencia.