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Dueño de la discoteca Jet Set rompe el silencio: “Soy el primero que quiero saber qué pasó”
En más de tres décadas nunca se realizó una evaluación estructural profunda a la discoteca

Antonio Espaillat, gerente y propietario junto a su madre del Jet Set. (Captura de pantalla © ZOL FM-YouTube)
Luego del colapso del techo de la emblemática discoteca Jet Set en República Dominicana, Antonio Espaillat, gerente y propietario junto a su madre del establecimiento, ofreció una extensa entrevista al programa El Día RD, donde relató en detalle cómo vivió la tragedia desde el extranjero, su reacción inmediata, y su compromiso con esclarecer los hechos y apoyar a las víctimas.
Espaillat se enteró del desastre mientras se encontraba en Las Vegas, Estados Unidos, participando en un evento. Según contó, eran las 10:30 p.m. en Las Vegas (1:30 a.m. en República Dominicana) cuando recibió una llamada que cambiaría su vida: su hermana, atrapada entre los escombros del Jet Set, le dijo entre gritos: “Antonio ha pasado algo increíble, escuchamos una explosión y todo el techo se ha desplomado y estamos todos debajo de escombros”.
El hombre afirma que recogió sus cosas y se dirigió al aeropuerto, logrando abordar un vuelo que lo llevó de inmediato de regreso al país. Al llegar, fue informado por su familia y allegados sobre la magnitud de la tragedia y se le recomendó no acercarse al lugar por razones de seguridad. Desde su oficina grabó un video para confirmar su presencia en el país y enviar un mensaje de apoyo.
La periodista le preguntó al propietario respecto al mantenimiento del local, y Espaillat explicó que el edificio fue adquirido en los años 80, cuando era el antiguo cine El Portal. Indicó que se hicieron remodelaciones para adecuarlo a su nuevo uso, como nivelar el piso, pero nunca se modificó la estructura original del techo ni se reforzó su soporte.
El empresario afirmó que el Jet Set recibía inspecciones regulares por parte de entidades como los bomberos, salud pública y el departamento de trabajo. Sin embargo, indicó que nunca se realizó una revisión estructural del edificio.
Sobre los plafones que se cayeron, detalló que eran de yeso y se sustituían con frecuencia debido a filtraciones o condensación del aire acondicionado. Estos trabajos eran realizados por el personal interno del local, ya que no se consideraban tareas complejas.
Espaillat también negó que existieran instalaciones indebidas en el techo, pues muchos de los comentarios apuntan a que estaba sobrecargada la estructura, aseguró que solo había seis unidades de aire acondicionado instaladas desde 1994 por empresas especializadas, y tres tinacos de agua.
Ante las especulaciones en redes sociales sobre negligencia o fallas previas, reconoció que la tragedia ha generado muchas dudas, incluso en él mismo. “Soy el primero que quiere saber qué ocurrió. No estaba ese día por razones de trabajo, pero normalmente los lunes siempre asistía. Si alguien me hubiera advertido de un riesgo, lo habríamos atendido de inmediato. Mi familia también estaba allí cada semana”, señaló.
El impacto personal de la tragedia ha sido devastador para Espaillat según dijo. Comentó que no ha podido dormir desde el incidente, que ha estado en contacto con las familias de las víctimas, y que está dispuesto a dar la cara y colaborar en todo lo necesario. El propietario de la famosa discoteca en República Dominicana dice que ha hablado con las familias de los seis fallecidos que eran trabajadores del centro.
Además, desmintió versiones sobre posibles sanciones legales o congelamiento de cuentas, afirmando que su equipo legal está al tanto de todo y que emitirán comunicados oficiales cuando sea necesario. También aclaró que el lugar contaba con cinco salidas de emergencia activas, y que todas las remodelaciones que se hicieron a lo largo de los años fueron estéticas, sin afectar la estructura del edificio.
Durante la entrevista, Espaillat se mostró afectado. Expresó que el Jet Set había sido parte fundamental de su vida familiar durante más de 30 años. Recordó con especial emoción el pasado 26 de febrero, cuando celebraron el 52 aniversario del local junto a su madre, esposa, hijos y otros familiares. “Jet Set era la vida de nuestra familia. Fue nuestro sustento por más de 30 años.. Lo que ha pasado es una tragedia que no imaginábamos posible”, afirmó.
Espaillat dejó claro que, por el momento, no contempla reconstruir ni recuperar el terreno donde operaba el Jet Set, el hombre expresó que el tiempo pondrá las cosas en su lugar y ahí irá viendo qué pasará.
