El cierre de Western Union traerá “variantes inimaginables” para las remesas a Cuba

Este pasado domingo se concretó el fin de las operaciones de la transnacional de envió de dinero Western Union que por más de 20 años ofreció el servicio de entrega de remesas en Cuba. La empresa de capital estadounidense se vió obligada a suspender su presencia en la Isla tras las sanciones de la administración de Donald Trump que prohíbe hacer negocios con empresas cubanas manejadas por los militares.

Ante tal escenario el economista cubano Omar Everleny Pérez ofreció una entrevista para la agencia de prensa AP donde advierte el impacto negativo de la ausencia de esta vía formal para enviar remesas a Cuba desde EEUU, pero afirmó que de seguro surgirán otras “variantes inimaginables”.

El cierre de Western Union traerá “variantes inimaginables” para las remesas a Cuba. (Foto: Periódico CUbano)

“No se puede desconocer que esa medida tendrá un cierto impacto, ya que mensualmente se realizan más de 240.000 transacciones entre Cuba y Estados Unidos a través de la Western Union. Por ende, no son valores despreciables”, dijo Everleny Pérez no sin antes recalcar que “ya se han llegado a utilizar hasta las criptomonedas, en la llegada de remesas, es decir las variantes son inimaginables”.

“Cuba tuvo períodos iniciales donde las transacciones se hacían a través de las llamadas “mulas” o por medio de familiares. Hoy viajan a Cuba provenientes de Estados Unidos unos 15 vuelos diarios”, y esa es otra vía para la entrada de dinero a Cuba desde EEUU, donde está asentada la mayor comunidad de cubanos exiliados de todo el mundo.

Según análisis del propio economista cubano “el volumen real de las remesas que se transfieren anualmente por Western Union tenían cifras que van desde los 900 a los 1.500 millones de dólares”.

Ninguna institución tiene acceso a las cifras oficiales del monto aproximado de dinero que llega a Cuba en forma de remesas, pero de forma generalizada se considera que el flujo de efectivo -sin contar artículos y productos que también son importados a Cuba por los cubanos en la diáspora- está alrededor de los 3.500 millones de dólares anuales.

Por lo tanto, el golpe que asesta EEUU a los militares cubanos que manejan Fincimex, el único socio financiero autorizado por el Gobierno cubano para hacer negocios con Western Union en Cuba, significa casi el 50% del flujo total de remesas a la Isla.

Para hacer realidad la sanción la administración Trump colocó a Fincimex y al ex yerno de Raúl Castro, el general de brigada Luis Alberto López Callejas (jefe del Grupo de Administración Empresarial GAESA) en la lista negra de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC). Es por ello que analistas consideran que el nuevo presidente electo de EEUU, Joe Biden, no le será tan sencillo desmontar las sanciones de Trump.

John S. Kavulich, presidente del Consejo Económico y Comercial Estados Unidos-Cuba, opinó en días recientes que “difícilmente Biden levantaría la prohibición para Western Union y Fincimex por su vínculo con las Fuerzas Armadas y a fin de no tocar intereses políticos en EEUU”.