El Gobierno incumple con el pago de la leche, denuncian ganaderos tuneros

Además de los impagos, los ganaderos plantearon otros problemas como los delitos contra la masa ganadera. (Foto: Facebook-Yaidel Miguel Rodríguez Castro)

El Gobierno cubano pide más sacrificio y producción a los campesinos que laboran la tierra día a día en medio de condiciones críticas, pero incumple reiteradamente los compromisos establecidos en los contratos.

El periodista oficialista Yaidel Miguel Rodríguez Castro, que cubrió una asamblea de los ganaderos tuneros del municipio Jobabo, refirió que desde el año pasado estos campesinos esperan por el pago que se le adeuda por parte de la Industria Láctea y el Comercio en el territorio. Los contratos con la agricultura incluían un pago en MLC por cada litro de leche aportado

La temática ha sido planteada una y otra vez durante los últimos meses, pero nada se resuelve. Los productores de leche se sienten engañados. En la reunión del pasado sábado, según refiere el periodista, no estaban presentes ni los representantes del Lácteo, Comercio y Finanzas y Precios.

El sectorial provincial de Finanzas y Precios, es la entidad que tiene la respuesta hoy de los montos que a través de Comercio se les paga a los ganaderos por la leche que se lleva a las tiendas y que es subsidiada por el Estado, explica Rodríguez Castro.

En la reunión celebrada en Jobabo, un municipio tradicionalmente rural y alto productor de leche, estuvieron presentes presidentes y representantes de cooperativas, de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP) y de la agricultura, como Ramón Rodríguez, Rubel González Méndez, Julio Villa Verdecia, Joan Javier Garriga y Alberto Joel Ávila; pero ninguno tuvo respuesta para los planteamientos de los cooperativistas.

Además de los impagos, los ganaderos plantearon otros problemas como la falta de atención al hombre, las complicadas condiciones de vida que provocan que muchos desistan y migren a la ciudad, la falta de recursos, las incongruencias en la implementación de las 63 medidas para dinamizar la agricultura y los delitos contra la masa ganadera, de los cuales se culpa al productor, pero nadie exige a las instituciones que tienen que encargarse realmente de los delincuentes.

El campesino Orlando Batista, con la sabiduría de los hombres que han dedicado su vida al surco, dijo que “no vamos a resolver el problema del hurto y sacrificio ilegal mientras las vacas estén trancadas y los ladrones sueltos”. De eso se tiene que encargar el Estado, pero en la actualidad los dirigentes comunistas están más preocupados por contener una inminente revuelta popular que por solucionar los problemas de los ganaderos cubanos.