Empresa cubana falsifica firma de un trabajador para exigirle pago por responsabilidad material

Los trabajadores cubanos no son defendidos por los sindicatos, pues estos defienden siempre a la administración. (Foto: Periódico Cubano)

Una grave acusación ha salido a la luz en el ámbito laboral cubano, al punto de publicarse en el diario oficialista Trabajadores. Se trata de la falsificación de una firma de un obrero por parte de la dirección de la empresa para fingir conformidad con un adeudo por concepto de responsabilidad material. Dicho acto pone en tela de juicio la integridad y transparencia de las prácticas laborales Cuba.

Ante la queja ciudadana, el abogado del Departamento de Asuntos Laborales y Sociales de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), Frank Castro Fiffe, ofreció su perspectiva legal sobre la situación.

El especialista advierte que el Decreto Ley 249 De la Responsabilidad Material, en su artículo 21, establece que cualquier exigencia de responsabilidad material debe ser notificada al trabajador mediante un escrito fundamentado en un plazo no mayor a 30 días hábiles después de que se haya tenido conocimiento del daño. Este escrito debe detallar claramente los hechos que originaron el daño y el monto monetario que se exige.

Esa primera parte fue cumplida por la empresa, pero luego quisieron embaucar al trabajador cuando sustituyeron el acta con una firma falsificada y elevaron a casi el doble la cuantía por responsabilidad material.

Para Castro Fiffe, el segundo documento carece de toda legitimidad y formalidad dado que la firma fue falsificada. Sin embargo, el primer documento, con la cifra inicial, mantiene su validez conforme a lo estipulado en el Decreto Ley 249.

Este caso ha generado gran preocupación, ya que pone en evidencia la vulnerabilidad de los trabajadores ante prácticas deshonestas por parte de algunas empresas. Es esencial que se tomen medidas para garantizar la transparencia y justicia en todos los procesos laborales, protegiendo así los derechos de los empleados.

Hasta el momento, no se ha emitido una declaración por parte de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), que debería proteger a los obreros ante los abusos de los patrones.

Recientemente, el secretario general de la CTC, Ulises Guilarte de Nacimiento, pidió a los cubanos más sacrificios y motivación, pues a su criterio la situación de crisis y miseria en la Isla es debido a la falta de productividad laboral.

Sus palabras han traído indignación entre los cubanos, que ven cómo la clase política disfruta de privilegios que les son negados al ciudadano común.

Guilarte llega a las reuniones en vehículos con aire acondicionado y suculentas meriendas y almuerzos que lo tienen pensando casi 300 libras. Allí realiza sus arengas políticas, mientras la mayoría de los cubanos enfrenta carencias básicas como falta de electricidad, agua, ropa y alimentos. Al mismo tiempo, otros son timados por la dirección de las empresas, sin posibilidad de acudir al sindicato para que los defienda ante la administración.