En un hospital de la provincia de Camagüey detectan una serie de deficiencias

El esposo de Leidys Tabares, líder de la Federación Latinoamericana de Mujeres Rurales (FLAMUR), estuvo ingresado en el hospital provincial de Camagüey desde el pasado 2 de enero hasta el 10 de febrero.

«Primero fue por un arresto, y el arresto trajo el infarto, del infarto fue al cateterismo…», declaró la activista a Radio Martí.

Llegó al hospital por una lesión en el muslo, «y tuvieron que hacer una operación para poderle salvar la pierna, pero al final no pudieron porque las condiciones del hospital… ellos no tienen nada para trabajar. Y el 24 de enero ellos deciden amputar la pierna», aseveró Tabares.

«Ese día autorizaron cinco amputaciones y fue con el agua de pipas y de tanques, porque no había agua», agregó.

Tabares explicó que en el centro hospitalario hay serias carencias de equipos, materiales y en general problemas con mala alimentación y la higiene.

«Los guantes son reciclables (…), no hay algodón. La comida… te puedo decir el menú: por la mañana solo leche de agua; al mediodía es arroz, potaje y un huevo hervido; por la tarde es picadillo de tenca, sopa y arroz. Es un pescado la tenca que no lo come aquí nadie», expresó Tabares.

En cuanto a las salas, hay pocos baños, si te tiene en cuenta el número de pacientes. Es un sistema de salud en crisis, subraya Tabares.

Además los baños se encuentran en muy mal estado y con mala higiene. Es un sistema de salud muy deteriorado, señaló la activista.

Con información de Radio Televisión Martí