Fórum de la ANAP premia a la inventora cubana del spam de chícharo

El chícharo lo emplean como sustituto de la carne. (Foto: Periódico Cubano)

La Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP) premió en un fórum de Ciencia y Técnica a una mujer cubana, originaria del municipio de Perico, por elaborar un spam de chícharo y un refresco de flor marpacífico (Hibiscus rosa-sinensis) ante la creciente crisis alimentaria que vive el país.

De acuerdo con una publicación de la Asamblea Municipal del Poder Popular en Matanzas, el jurado destacó a la emprendedora por su destacado espíritu en la búsqueda de alternativas alimenticias. La señora, identificada como Marilyn, también presentó otros productos a base de soya como leche saborizada con fresa y queso. Además de hamburguesa y mayonesa, también a base de soya.

“La mujer matancera ha logrado, con el apoyo de la ciencia y la técnica, convertir ingredientes tradicionales en propuestas innovadoras que responden a las necesidades actuales de la sociedad cubana”, refieren desde el oficialismo, pero las críticas de los cubanos no han hecho esperar, pues nada de lo presentado en el fórum resuelve el problema del hambre en Cuba.

“Nada de eso es comida. Todos son inventos. No es solo engullir como animales, también hay que pensar en lo que nutre y aporta beneficios al desarrollo humano. Mientras el pueblo celebra y se come toda esa porquería, otras en el gobierno se comen la carne de res y la leche de vaca”, comentó desde su perfil de Facebook, Imi Giselle.

Opinión similar tiene Héctor Herrera, quien afirmó que “las personas necesitan carne para vivir, no esos inventos asquerosos. Este es el único país que premia la mediocridad”.

La crisis alimentaria en Cuba ha sido influenciada por múltiples factores a lo largo de las décadas. Aunque el país posee tierras fértiles, ha dependido en gran medida de importaciones de alimentos, lo cual se atribuye a políticas agrícolas desfavorables, falta de tecnologías modernas y problemas en la infraestructura agrícola.

El colapso de la Unión Soviética, principal aliado y socio comercial de Cuba, a principios de los años 90, desencadenó el «Periodo Especial», marcado por graves escaseces. En los últimos tres años, la pandemia del COVID-19 agravó estos problemas, al paralizar el turismo, fuente crucial de ingresos, y afectar las cadenas globales de suministro.

En 2021 estas adversidades culminaron en protestas públicas en la isla. Aunque el gobierno atribuyó parte de las dificultades a las sanciones estadounidenses, críticos tanto internos como externos han señalado las políticas y restricciones del propio régimen castrista como contribuyentes clave a la situación.

Actualmente, en Cuba conseguir un cartón de huevos es una tarea bien complicada. Cuando se logra hay que pagar entre 2.000 y 3.000 pesos cubanos (CUP), lo cual es un salario mínimo mensual. La situación es peor cuando se habla de carne, una caja de pollo puede llegar a costar 6.000 CUP en su versión de 10 kilogramos y la libra de carne de cerdo importada está valorada en 680 CUP. Lo anterior evidencia la crisis enorme que vive la población.