Gran Maestro cubano, con residencia en España, entre los detenidos por las protestas en la Isla

GM Arián González está detenido en Cuba (Collage: Arián González – Facebook y Assiel Hernández)

Arián González, Gran Maestro cubano de ajedrez, va a ser procesado por los presuntos delitos de “desorden público” e “incitación a las masas”, tras ser detenido por participar en las protestas contra el castrismo.

La agencia EFE informó que el ajedrecista, de 32 años y con residencia en España, actualmente se encuentra detenido en la estación de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR), ubicada en Camajuaní, en Villa Clara.

González llegó a la Isla para visitar a su madre enferma de diabetes y además dotarla tanto de medicinas como de alimento ante la escasez generalizada.

El ajedrecista, ganador del campeonato universitario en España, fue detenido el lunes por la tarde y estuvo considerado como desaparecido al no haber información sobre su paradero tras el arresto.

Ante lo sucedido con el Gran Maestro, la Federación Española de Ajedrez entró en contacto con su similar en la Isla para tener información sobre él y exigir su libertad inmediata.

Liceo Academia Postal, club donde juega González, expresó su preocupación por el arresto y un deseo de que regrese pronto a tierras ibéricas a través de una carta enviada al embajador de Cuba en Madrid.

El director técnico de dicho club, Joaquín Bello, aseguró que el joven no es un activista y a su vez cubanos en el exilio pidieron que se viralice en las redes una petición de liberación inmediata.

González, quien también es abogado, tiene programado entre sus competencias participar en el Memorial Marcote de Ajedrez que se celebrará del 15 al 22 de agosto.

El ajedrecista es parte de las más de 400 personas detenidas o desaparecidas por participar en las protestas, según un listado de la plataforma Cuba Decide.

Autoridades de la Fiscalía General de la República de Cuba aseguraron en televisión nacional que los detenidos por las manifestaciones enfrentarían sentencias de hasta 20 años de cárcel.

Lo anterior es porque falsamente van a ser acusados de delitos como desorden público, instigación a delinquir, robo con fuerza, resistencia, atentado, lesiones, desacato, daños a la propiedad y propagación de epidemias.