Indignación en redes sociales por la caza de un tiburón cerca del malecón habanero

Cubanos en redes sociales no tomaron con agrado la caza de un tiburón cerca del malecón habanero. (Imagen de referencia: WikiTiburones)

La caza de un tiburón esta semana en las cercanías del malecón habanero ha causado una enorme indignación en las redes sociales, así como dudas sobre si realmente se aplica en Cuba lo estipulado en la Ley de Bienestar Animal.

En el perfil en Instagram de Vistar Magazine se encuentra publicada una imagen del escualo muerto, aún mordiendo un cebo de carne, mientras un hombre se encuentra sentado sobre él.

Los usuarios comentaron el post para demostrar su malestar hacia la captura del animal. Algunos coincidieron en mencionar que no había necesidad de cazar al tiburón, porque nadie se mete al mar en la zona del malecón y por ello no representaba peligro para la vida humana.

“¿Por qué hacen esto con el animal?, si no había atacado a nadie. Se burlan de la Ley de Protección Animal”, manifestó una de las personas.

Otra cibernauta, llamada Marian, comentó que en el país se busca la aplicación de nuevos códigos y la actualización de leyes para una mejor armonía, pero actos como este demuestran mentes muy cerradas y violentas.

Otro internauta identificado como Sergio explicó que la caza del tiburón demuestra el hambre en la Isla y con ello la enorme necesidad de conseguir alimento con urgencia.

“Cuando hay necesidad, no hay tiempo para pensar si la caza del animal es ofensivo para algunos. No es deporte este caso, ni diversión”, agregó.

La ley de Bienestar Animal entró en vigor en Cuba desde el año pasado, pero no ha sido del agrado de animalistas debido a que sus artículos no protegen a toda la fauna en la Mayor de las Antillas, únicamente se centra en los animales domésticos, como perros y gatos.

La normativa autoriza diversas formas de maltrato que representan entradas de dinero para el Estado, como las pelas de gallos, rodeos, caza deportiva y circos.

El contenido tiene una redacción muy abstracta, en la cual no se incluye la obligación específica de los individuos de cumplir con lo dicho en los artículos; además, no se nombra al maltrato como tal ni sus implicaciones.

“El Decreto-Ley de Bienestar Animal en Cuba es una norma para regular su uso, pero no garantiza la protección ni la relación armónica entre los seres humanos y el resto de las especies, como condición insoslayable para la existencia de todos”, denunciaron los ambientalistas en un comunicado vía Facebook emitido el año pasado.