Islas Caimán anuncia la ampliación de un centro de detención ante la llegada de balseros cubanos

Balseros cubanos también han tomado rumbo hacia Islas Caimán para alejarse del comunismo. (Foto: Periódico Cubano)

El gobierno de las Islas Caimán anunció la ampliación de un centro de detención de inmigrantes, para tener más espacio con vistas a los balseros cubanos que continúan llegando a su territorio.

La medida busca sacarlos del Centro Cívico de Bodden Town, que se encuentra superpoblado. El medio de prensa Cayman Compass reportó que al menos una docena de ciudadanos oriundos del país caribeño, que vivían en alojamientos alquilados, fueron detenidos y trasladados a este centro temporal en los últimos días.

Aunque estos migrantes eran monitoreados electrónicamente por funcionarios de Aduanas y Control Fronterizo, fueron llevados al centro comunitario que se utiliza como refugio para los indocumentados.

El funcionario encargado de la seguridad fronteriza, Robert Saunders, indicó que el gobierno comprende las preocupaciones sobre el uso del espacio cívico, y por ello se da prioridad a esta ampliación.

La medida busca mejorar las condiciones de vida de los balseros y asegurar que tengan un alojamiento adecuado y seguro, mientras se procesan sus respectivos casos de petición de asilo o futura deportación.

«Al final del día, la mayoría de ellos han solicitado asilo. Tenemos un proceso por el que tenemos que pasar, que es un proceso internacional. Tenemos que mirar cada caso de manera diferente», comentó Saunders.

El movimiento migratorio desde la Mayor de las Antillas, motivado por la crisis económica y la represión, también incluyó como uno de sus destinos al archipiélago. Balseros cubanos comenzaron a arribar a este lugar en vez de movilizarse hacia Estados Unidos o aprovechar el libre visado en Nicaragua.

Las autoridades caimanesas declararon que la llegada repentina de los cubanos comenzó a afectar los presupuestos locales y, ante ello, pusieron en marcha medidas para tratar de desalentar el arribo de los indocumentados, como la prohibición de buscar trabajo si no se cuenta con el refugio o el asilo.

“Estamos en medio de una crisis con graves implicaciones económicas y de seguridad, el aumento significativo de llegadas está ejerciendo una gran presión sobre la Agencia de Control de Aduanas y Fronteras, tanto en Gran Caimán como en Caimán Brac”, precisó Saunders, al revelar la presencia de 350 cubanos en los centros de detención en el mes de enero.

El gobierno de Islas Caimán incurre en un gasto mensual de 1.300 dólares por cada inmigrante indocumentado, y en promedio, debido a los tiempos de procesamiento, cada uno termina costando alrededor de 11.700 dólares, sin tener en cuenta los gastos de la repatriación.