Jefa del Centro de Estudios de la Economía Cubana recomienda eliminar las tiendas en MLC

Las tiendas en MLC han pasado a ofertas artículos de primera necesidad cuando se dijo que eso no pasaría. (Foto: Periódico Cubano)

La doctora en ciencias económicas Betsy Anaya, directora del Centro de Estudios de la Economía Cubana en la Universidad de La Habana, recomendó eliminar las tiendas en Moneda Libremente Convertible (MLC) pues son “insostenibles e inaceptables”.

Las declaraciones de Anaya se dieron durante una entrevista concedida a la revista Alma Mater, una publicación de esa casa de altos estudios. La catedrática recordó que la intención de las tiendas era recaudar la divisa que había en el país, pero en la actualidad es “insostenible e inaceptable que los productos de primera necesidad se comercialicen en una moneda que no es el peso cubano (CUP) y para la cual no existe ningún mecanismo cambiario oficial”.

El gobierno cubano estableció una tasa oficial de 24 CUP por cada dólar estadounidense, pero nunca ha vendido la divisa extranjera, pues prohibió la circulación del efectivo. Para que la población pueda comprar en esas tiendas debe acudir al mercado informal donde la cotización (a febrero de 2022) es de 100 CUP por cada dólar. Pero lo peor es que siendo el propio gobierno castrista quién obliga a la población a tener dólares para comprar en esas tiendas, también es la misma autoridad quien fija penas de cárcel por la compra y venta de la moneda estadounidense en el sector informal.

La directora del Centro de Estudios de la Economía Cubana se queja de que estando al frente de este organismo científico y de asesoría no posee datos reales de la economía local. “No manejo las cifras de los que las tiendas en MLC están significando para el país en términos de ingresos”.

Sin embargo, su consejo de economista es que debe eliminarse dichas tiendas para la población y en su lugar crear “ventas en zonas francas para las personas naturales y jurídicas, pero garantizando la venta legal del MLC a quienes deseen acudir a estos espacios”.

La revista Alma Mater entrevistó a otros cinco economistas cubanos, la mayoría de los cuales trabaja en la Universidad de La Habana como investigadores o profesores. Todos coincidieron en eliminar estos comercios, pues tienen un alto costo político para el gobierno.

En el caso de Antonio Romero argumentó que el fin de estas tiendas significará el restablecimiento de la soberanía monetaria del país y que la moneda nacional (CUP) cumpla todas sus funciones dinerarias.

Para Ricardo Torres la cuestión de las tiendas en MLC es económica y política: “Que Cuba dependa en tan alto grado de las remesas (…) para la entrada de esas divisas en la economía ilustra claramente el grave declive productivo que afecta a la nación”.

Juan Triana señaló que “la raíz del mal está en la estatización y monopolización del comercio minorista en la magnitud en que ha existido desde 1968. Ha sido uno de los más pesados fardos con el que ha tenido que cargar la economía cubana”. El castrismo también.