La escritora María Elena Hernández sobre Cuba dice: “No me marché, me escapé”

La escritora cubana María Elena Hernández, habla sobre los motivos para abandonar su natal Cuba, y a la pregunta de ¿Por qué?, responde con otra pregunta: ¿me queda algún motivo para no querer marcharme de Cuba? Y en tono tajante responde: “No me marche, yo me escapé”.

María Elena recuerda cuando la presidenta del CDR le advertía con frecuencia a su madre: “han venido a investigar a tu hija. Mi madre me decía: no lo pienses, vete. Y me fui bien lejos. Nunca regresé. Ni pienso”, expresó.

El primer detonante ocurrió dice, cuando tenía dieciocho años, luego de haber sido acusada por un policía borracho de homosexualidad

“Hasta me hicieron juicio. Me pedían 2 años de cárcel, que (gracias a algunas intervenciones de amigos), terminó en multa de 200 pesos que pagó mi madre.

Luego, en referencia a otro detonante afirma que fue la golpiza que en la librería El Pensamiento recibieron sus amigos poetas.

Durante el proceso, asegura haber aprendido cosas nuevas, cosas diferentes, “que no todo es blanco, o negro, a olvidar la palabra compañero, a caminar por una calle. Incluso, aprendí a leer. A hablar. A comer. Me soltaron en el mundo, era, otra vez, un bebé”.

De acuerdo con Radio Martí, La libertad para la literata cubana es responder por uno mismo, “de los éxitos, de los fracasos, no tener que echarle más la culpa a nadie, ni a nada”.

Por último y en referencia al concepto Patria afirma:

“Durante todos estos años, me he mudado mucho de país, de ciudad. En todos los lugares he encontrado a los míos. Somos una secta. La poesía es mi patria. Ella no me exige nada, sólo que no malgaste el tiempo llenando páginas y páginas sin sentido. Caer en la palabrería es el único riesgo de quedar expatriada”

Y expresa: “Ah!: Mi patria tampoco me perdonaría que ande por ahí, disfrazada de poeta”.