“Las tiendas en dólares (MLC) son para incentivar las remesas desde el exterior”: Raúl Castro

Hasta el arroz en Cuba tiene que ser comprado con los dólares enviados como remesas. (Foto: Periódico Cubano)

El General de Ejército y primer secretario del Partido Comunista de Cuba, Raúl Castro, confesó que “las tiendas en Moneda Libremente Convertible (MLC) son para incentivar las remesas desde el exterior” que envían los cubanos obligados a abandonar la Isla en busca de un futuro mejor.

Abiertamente Castro echó por tierra los ideales de su hermano cuando en décadas pasadas se catalogaban de “gusanos” a todos los cubanos que escapaban del control comunista, una política que dividió familias enteras. Las consignas de “no los queremos, no los necesitamos” quedaron sustituidas por la necesidad de dólares de un sistema económico que no es capaz de producir los alimentos que demanda una población de apenas 11 millones de personas.

Para Raúl Castro el problema de rechazo que hay dentro de la población con la impopular medida de vender casi todo en MLC es producto de “una inadecuada política de comunicación social y la publicación de enfoques incorrectos en varios de nuestros medios de prensa”.

Sin embargo, esos medios de prensa son controlados por el Comité Ideológico del PCC del cual Castro es el máximo jefe. Por lo tanto, si hay “errores comunicacionales” en parte son su responsabilidad.

En su discurso ante los 300 delegados al 8vo Congreso, Raúl trató de expresar con sus palabras cómo debería haberse explicado la dolarización de la economía cubana que inició de forma parcial por la comercialización de equipos electrodomésticos y actualmente abarca los alimentos y productos de primera necesidad.

“La situación extrema de falta de liquidez nos obligó a reintroducir las ventas en moneda libremente convertible en una parte del comercio minorista y más adelante del mayorista”, explicó el octogenario militar que está a punto de cumplir 90 años de edad.

“Esta necesaria medida tuvo el propósito inicial de asegurar la presencia en el mercado interno de un conjunto de surtidos que a lo largo de los últimos cinco años fueron desapareciendo de la oferta estatal, dejando espacio para la actividad ilegal de la compra en el exterior y la reventa de esos artículos con altísimas tasas de ganancia”.

La pandemia de coronavirus, originada en China, también es culpable de la dolarización. El primer secretario del PCC dijo que tras la llegada del Covid-19 “se ampliaron las ventas en moneda libremente convertible hacia otros productos, incluyendo los alimentos, con el objetivo de incentivar las remesas que los ciudadanos cubanos en el exterior realizan a sus familiares en el territorio nacional”.

El General de Ejército, apartado de toda la realidad cubana y sumido en su burbuja dictatorial, afirma que con los dólares recaudados “el Gobierno ha asegurado la asignación de un apreciable volumen de divisas para garantizar la sostenibilidad de la oferta en pesos cubanos de un reducido grupo de productos básicos de la alimentación, la higiene y el aseo personal y se trabaja para restablecer la presencia de los proveedores nacionales en este mercado”.

A los “cuadros de dirección” que les tocó implantar las ventas en dólares y enfrentar a la población que no tiene acceso a esta divisa, Raúl les reprochó su conducta pues la “emprendieron contra la supuesta desigualdad que emana de estas ventas y reclamaban que todo el comercio interior del país regresara a la libreta de abastecimiento”.

“Con el decursar de los meses y las intervenciones públicas del Presidente de la República, el Primer Ministro y otros funcionarios del Gobierno, se logró hacer comprender que las ventas en moneda libremente convertible son necesarias y que perdurarán el tiempo que nos tome recuperar y fortalecer la economía y con ello asegurar la real convertibilidad de la moneda nacional”, enfatizó Castro dándole el visto bueno al trabajo de Miguel Díaz-Canel y Manuel Marrero dos fieles comunistas designados en su cargo por el mismo.