Lo que encubre el NTV sobre la Open Society Foundations en Cuba

El sistema de propaganda del régimen cubano ha desatado una cruzada de difamación hacia medios independientes y activistas por recibir fondos desde programas de la Open Society Foundations (OSF), una red internacional de instituciones benéficas fundada por el magnate empresarial George Soros.

A través del Noticiero de la Televisión Cubana (NTV) , el gobierno cubano lleva a cabo una campaña conspirativa con contenidos sesgados y manipulados, donde presentan argumentos falsos con el objetivo de desacreditar y desarticular el pujante sector de la sociedad civil y la oposición.

Estas manifestaciones de ataque tienen su núcleo central en el modo de financiamiento con que cuentan varios de estos medios independientes, los cuales reciben fondos de programas de la OSF.

Sin embargo, hay una historia que Humberto López y compañía se niegan a contar rotundamente, porque desmonta desde la base toda la trama de descalificaciones que han protagonizado las últimas semanas

Periodismo de Barrio, uno de los sitios que reciben subsidios de la OSF, tal y como enuncian transparentemente en su Código de Ética, publicó una extensa investigación sobre cómo el gobierno cubano obvia o encubre a su antojo el dinero proveniente de la Open Society Foundations que involucra a personas e instituciones apegadas al régimen.

El caso de Engage Cuba

Engage Cuba constituye una “coalición de compañías y organizaciones estadounidenses” que tiene por objetivo realizar lobby para la eliminación del embargo y las restricciones de viajes a Cuba.

La prensa oficial cubana ha elogiado decenas de veces el trabajo de esta institución, sin mencionar jamás que la misma hace uso de fondos de Open Society Foundations, de carácter público, para avanzar en sus objetivos.

Al parecer, para la televisión cubana este tipo de fondos que recibe Engage Cuba no tienen por objetivo un “cambio de régimen” en la Isla, esta institución no es “mercenaria”, ni trabaja en secreto para cumplir los objetivos de administraciones estadounidenses.

El dinero de la OSF se convierte en el algo “sucio” solo cuando se trata de organizaciones fuera del control férreo del estado cubano. ¿Vaya paradoja, no?

Según expone la investigación de Periodismo de Barrio, “Engage Cuba recibió dos subsidios del programa América Latina y el Caribe en 2017. El primero, por un término de seis meses, el segundo, durante el mismo año y por un término de dos años, para “apoyar la promoción de políticas [de Estados Unidos] sobre Cuba”.

Su labor no solo ha sido reseñada de manera positiva en varios medios estatales, sino que su presidente, James Williams, fue entrevistado en el programa televisivo Mesa Redonda.

La Fundación Ludwig de Cuba

Esta entidad artística “constituye una institución no gubernamental registrada en Cuba que estimula la creación y la reflexión en diversas manifestaciones del arte”.

En el año 2017, dicha Fundación trabajó junto a la prestigiosa organización colombiana Casa de las Estrategias durante dos años y medios en un proyecto financiado por ¿saben quién…? Sí, la Open Society Foundations. Solo elogios recibió en la prensa estatal cubana.

Se destaca igualmente la visita a Cuba que realizara la Orquesta del Conservatorio Bard a Cuba, entre el 6 y el 10 de junio de 2016. Esta fue posible gracias al financiamiento de la OSF, así como la celebración de los conciertos dirigidos por Leon Botstein en Cienfuegos, Santa Clara y La Habana, uno de ellos junto a la Camerata Romeu.

El Cenesex de Mariela Castro

El Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex) encabezado por la mismísima Mariela Castro, hija de Raúl Castro igualmente ha estado vinculado con proyectos financiados por Open Society Foundations ¿Lo sabrá Humberto López?

Revela Periodismo de Barrio que “en 2015, la banda mexicana Quetzal fue invitada por el comité organizador de la cuarta Jornada Cubana contra Homofobia y Transfobia”, un evento que incluso fue publicado en la web de la Open Society Foundations.

El viaje de Quetzal a Cuba fue posible gracias al Centro para la Democracia en las Américas, una de las organizaciones que recibe financiamiento de Open Society Foundations y recibido con beneplácito por la hija del máximo líder del régimen.

Debe quedar claro que no estamos juzgando las formas en que han sido financiados estos proyectos previamente mencionados, reafirmamos que esta es una vía sumamente legítima para obtener ingresos que ayuden a concretar ideas enfocadas en el empoderamiento ciudadano y en la ayuda a sectores vulnerables.

Nuestra crítica se centra en la cobertura intencionalmente manipulada que realiza el aparato propagandístico del estado cubano para atacar a la prensa independiente, basada en la obtención de fondos desde la Open Society Foundations, a la vez que encubre este mismo acto cuando involucra a instituciones y figuras políticas vinculadas al régimen.

¿Por qué unos sí y otros no?