Madre de una joven cubana con cáncer está desesperada por la demora de USCIS

En Cuba no existe la alimentación adecuada que exige la condición de salud de Linda Hernández y el centro que debería atenderla se encuentra cerrado debido a la pandemia del Coronavirus. (Captura de video: Cortesía de Maite Luna)

Airelys Acosta es la madre de Linda Hernández, una joven cubana de 26 años residente en la isla que fue operada de una lesión tumoral en el páncreas.

Linda sobrevivió a una complicada operación, un resultado que los doctores cubanos consideraron “un milagro”. Su vida ahora depende de un medicamento imprescindible para su recuperación.

Debido a su enfermedad, Linda necesita tomar de por vida el medicamento Pankreatan, que reemplaza las enzimas digestivas que su cuerpo no produce.

Ese medicamento no está disponible en Cuba, donde tampoco existe un sistema de transporte de emergencia adecuado, en caso de que necesitara recibir atención médica inmediata.

Se trata de una situación alarmante para el doctor Alberto Manzor, radicado en Miami, dispuesto a atender a la joven tras evaluar su caso. “Los síntomas que ella refirió en su video, son síntomas de las complicaciones que está teniendo y estas complicaciones necesitan una atención urgente”, dijo.

En Cuba no tendrá nunca acceso a la alimentación adecuada que exige su condición de salud y el centro que debería atenderla se encuentra cerrado debido a la pandemia. “Tengo miedo de que pase algo y no estar al lado de mis padres”, dijo Linda Hernández en un video que transmitió en Facebook la periodista Maite Luna.

Su madre, que vive en Hialeah, solicitó una visa humanitaria a través de la oficina de la abogada de inmigración Laura Jiménez, quien se aseguró de enviar a inicios del mes de abril toda la documentación necesaria, en cumplimiento con los estrictos requisitos de USCIS para otorgar este tipo de visado.

“La salud de la niña no está bien, no tiene a dónde acudir porque los hospitales están cerrados por el COVID, no tiene el medicamento porque está en falta en Cuba”, dijo.

La solicitud de la visa enviada a USCIS por la abogada Laura Jiménez, describe la urgencia del problema de salud de la joven, considerado como un asunto de “vida o muerte”, lo que le debería otorga un carácter inmediato para ser procesado de manera expedita.

Jiménez también incluyó los documentos que aseguran el tratamiento de Linda Hernández en EE. UU., así como la garantía financiera para sufragar sus gastos en el país.

“Hasta el día de hoy, USCIS no ha emitido un aviso de recibo, a pesar de que la carta contiene claramente la solicitud acelerada requerida y la evidencia suficiente”, dijo la abogada, quien ha empleado como último recurso una petición a la embajada de Estados Unidos en La Habana, para que Linda Hernández sea entrevistada y se valore la posibilidad de que pueda viajar de manera expedita con una visa B2.

Los padres de Linda, Airelys y Conrado, iniciaron en 2018 un proceso de reclamación para sus dos hijas residentes en Cuba que fue aprobado recientemente, pero Linda no calificó para viajar con su hermanita, pues tenía 21 años cuando se sometió la petición migratoria.

Ambas hermanas se encuentran varadas en Cuba, ya que la menor se quedó para cuidar de Linda.