Madre denuncia el presunto asesinato de su hija en la prisión para mujeres de El Guatao

Una madre cubana, identificada como Yamilka Toledo Rodríguez, denunció en redes sociales que su hija fue maltratada y asesinada en la prisión para mujeres de El Guatao, en La Habana.

La víctima de la supuesta agresión, responde al nombre de Yessica Torres Toledo, quien era mamá de un niño de seis años con problemas de salud.

Toledo Rodríguez, trabajadora en el hospital ortopédico ‘Frank País’, comentó vía Facebook que su hija era asmática y tenía problemas de tiroides. Asimismo, denunció que le hicieron una presunta intervención quirúrgica sin permiso.

“Una madre tiene el derecho a defender a su hija asesinada, necesito que me ayuden a resolver ese problema, las gentes que le hicieron esto a mi hija están en contra de la revolución, es una falta de respeto, ella murió en la prisión, tiene huellas de maltratos”, agregó la progenitora a su denuncia.

Como en su publicación ofreció “un respeto a la revolución” y acusa a contrarrevolucionarios de ser los victimarios de Torres Toledo, algunas personas en los comentarios lamentaron que defienda al régimen ante la muerte de su hija en una de las cárceles castristas.

“Lo siento por su pérdida, pero abra los ojos, los que hicieron esto no están en contra de la revolución, los que hicieron esto son los mismos revolucionarios y comunistas que hay en Cuba, esto es un Estado fallido, pida justicia incansablemente”, manifestó la usuaria Karla Silverio.

Otra internauta le comentó que “esa revolución no es digna de respeto, en ella maltratan a quienes no pueden defenderse y está llena de policías corruptos. No es el primer ni será el último caso de abuso contra los reclusos en las prisiones, ya basta de tanto maltrato físico y psicológico a las personas por solo decir la verdad”.

La prisión de El Guatao es un infierno para las activistas cubanas

En la misma prisión donde murió Yessica Torres Toledo, se encuentran privadas de su libertad algunas opositoras al régimen que han luchado a favor de los derechos humanos en la Isla y también fueron parte del estallido social del 11 de julio de 2021.

Entre las convictas de conciencia están las hermanas María Cristina y Angélica Garrido, así como la activista Lizandra Góngora. Las tres han sido maltratadas y encerradas en celdas de castigo completamente antihigiénicas.

Estas opositoras han denunciado golpes, trabajos forzados, decomiso de pertenencias y en ocasiones no les han permitido recibir cosas que les llevan sus familiares, las cuales sí están autorizadas para otras reclusas.