Marisleysis Duharte, la ex jabalinista cubana y campeona mundial juvenil olvidada por el régimen

A principios de 2018 fue diagnosticada con esclerodermia, una enfermedad degenerativa que ataca, principalmente, los músculos y la piel, y para la que no existe cura hasta el momento.

La campeona mundial juvenil de atletismo en lanzamiento de jabalina, Marisleysis Duharte Morell, denunció en su perfil de Facebook las tristes condiciones en las que vive tras su retirada del deporte por motivos de enfermedad.

La cubana hizo la publicación en la red social, donde expuso su precaria situación y el abandono en que se encuentra por parte de las autoridades gubernamentales, en un post que acompañó de fotos de cuando ella antes y después en vida.

«Aquí está Marisleysis Duharte Morell, quien era una persona sana, alegre y llena de vida hasta que comencé mi vida deportiva», explica la ex atleta de 22 años.

«Fui campeona mundial de atletismo en la modalidad del lanzamiento de la jabalina, donde aporté varias medallas a mi país, pero según yo iba triunfando, mi enfermedad fue avanzando, la cual comenzó estando en las manos del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (INDER), donde ahora nadie se acuerda de mí, ni de quien soy, ni de quien fui y mucho menos de lo que aporté como deportista a la nación», se lamenta la santiaguera.

El éxito de la exjabalinista llegó durante el Campeonato Mundial Juvenil celebrado en Nairobi en 2017, con un registro de 62.92 metros, lo cual constituyó récord para el evento. Anteriormente, en la Copa Cuba, había registrado 65.44 m.

El éxito de la ex jabalinista llegó durante el Campeonato Mundial Juvenil celebrado en Nairobi en 2017, con un registro de 62.92 metros, lo cual constituyó récord para el evento. (Foto: Facebook)

Ese mismo año, ella y el triplista Jordan Díaz, quien también se coronó en el certamen del orbe celebrado en la capital kenyana, fueron los atletas más destacados de la categoría en el país.

Sería a finales de 2017 y principios de 2018, cuando sería diagnosticada con esclerodermia, una enfermedad degenerativa que ataca, principalmente, los músculos y la piel, y para la que no existe cura hasta el momento.

Actualmente, vive en a Bicoca perteneciente al consejo popular de Ti-Arriba del municipio Songo La Maya, en la provincia Santiago de Cuba. El avance de la dolencia le impide caminar y valerse por sí misma.

«He ido varias veces a instituciones del gobierno pertenecientes a mi provincia y a mi municipio y no he podido resolver que me ayuden en nada de lo que yo necesito y realmente me hace falta. No tengo ayuda por ninguna parte de las personas que yo esperaba ni de la institución en la que me encontraba», denuncia en su publicación.

«En nuestro país se habla de derechos humanos, pero en estos momentos no sé dónde están, porque en la situación que me encuentro creo que tengo derecho a ser mejor atendida; tengo derecho a ser mejor y más tratada, y tengo derecho a una mejor atención por parte del INDER, que fue estando en él donde me enfermé y por parte del Gobierno cubano, no por lo que yo haya aportado, no por haber sido campeona mundial o buena deportista, sino por todos los avances que han hecho en nuestro país y que no llegan donde estoy como persona ‘vulnerable’ y que según nuestro Gobierno son a la que más se están ayudando», explica Marisleysis.

La única “ayuda” que percibía Duharte, era de 1088 pesos, la cual le fue rebajada hasta 808 pesos, «sin explicación alguna». Esa suma no le alcanza ni para alimentos ni para medicamentos, afirma Duharte Morell y pregunta si una persona puede seguir subsistiendo en esas condiciones. «¿Cómo vivo y de qué me mantengo?»

Lo cierto, es que la santiaguera no ha sido la única olvidad por el régimen. Durante una entrevista al diario oficialista Trabajadores, el ex corredor cubano Osvaldo Lara, medallista en Juegos Panamericanos y Juegos Centroamericanos y del Caribe, contó al periódico estatal que había sido relegado al olvido, sin retiro y con solo 700 pesos mensuales por una de sus medallas, suma ridícula con los precios de Cuba en la actualidad.

Ante este lamentable panorama, cada día son más los deportistas que optan por desertar de las delegaciones antillanas en sus salidas en competiciones internacionales. Otra faceta más en la que el castrismo ha demostrado ser un régimen déspota que se beneficia de su pueblo y luego los hace a un lado cuando ya no los necesita.