Minint informa sobre hallazgo de lancha rápida al norte de Ciego de Ávila

Una nota oficial del Ministerio del Interior (Minint) de Cuba informa sobre el hallazgo de una lancha rápida al norte de Ciego de Ávila por oficiales de las Tropas Guardafronteras de la Capitanía del Puerto de Júcaro.

La embarcación fue abandonada en la zona conocida como Punta Mangle, municipio de Morón, siendo avistada el pasado 1 de febrero.

De acuerdo con la nota, la lancha rápida es del modelo Boston Whaler, color azul, material del casco fibra de vidrio, eslora 4,95 metros, manga 1,90 metros, puntal 0.80 metros, y posee un motor fuera de borda, marca Yamaha de 80 HP.

La información pública sirve para que “las personas naturales o jurídicas con derechos sobre el bien hallado, interesadas en ejercerlo” se presenten en las oficinas de la Capitanía de Júcaro, localizada en Cayo Coco, municipio de Morón, Ciego de Ávila.

Para reclamar la propiedad deben contar con documentos que lo acrediten y acudir antes de que transcurran 30 días naturales, contados a partir de la publicación de la nota oficial. En caso contrario, la lancha será decomisada y pasará al inventario de embarcaciones del Minint.

Muchas veces estos navíos llegan a la costa norte de Cuba tras ser abandonados en mar abierto, generalmente desde Estados Unidos. También suelen ser utilizados para transportar a los cubanos que quieren emigrar de la Isla hacia las costas de la Florida.

De demostrarse que las embarcaciones fueron empleadas para contrabando o cualquier actividad ilegal, serían decomisadas por el Estado cubano por orden judicial. Esto implicaría que si alguien las reclamara y más tarde se comprobara su uso en actividades ilícitas, no solo le quitarían las embarcaciones, sino que la persona en cuestión enfrentaría la pena correspondiente al delito.

Durante las últimas décadas, los balseros cubanos han sido un símbolo de la búsqueda de libertad y la esperanza de una vida mejor. A lo largo de los años, miles de personas han arriesgado sus vidas en precarias embarcaciones para escapar de la opresión y la pobreza que impera en el país caribeño.

Los primeros balseros cubanos se remontan a la década de 1960, cuando los disidentes políticos intentaron huir del régimen comunista. En ese entonces, el gobierno comenzó a tomar medidas para evitar la salida ilegal de ciudadanos, lo que provocó un aumento en el número de balseros.

Durante la década de 1980, llegó la primera crisis migratoria, cuando la dictadura permitió a miles de ciudadanos abandonar el territorio nacional durante lo que se conoció como el “éxodo del Mariel”, en el que los refugiados cubanos llegaron a la costa de Florida en grandes balsas y barcos improvisados.

En los años siguientes, la Guardia Costera de EEUU intensificó sus patrullas para evitar que los balseros cubanos llegaran a suelo estadounidense. Sin embargo, muchos siguieron intentando arribar a la costa de Florida a pesar del peligro, como en la segunda ola en el año 1994.