Minrex responde a Canadá por su reciente decisión de retirar de Cuba a familiares de diplomáticos

Luego de darse a conocer la decisión por parte de Canadá de retirar a los familiares de su personal diplomático, por presentar síntomas asociados a los presuntos ataques sónicos, el Ministerio cubano de Relaciones Exteriores (Minrex) extendió su respuesta, tal y como era de esperar.

De esta forma el Minrex le expresó al mencionado país norteño que Cuba es un país seguro.

Mediante una declaración oficial, el órgano reiteró que la rigurosa investigación, realizada por un grupo de expertos de alta calificación, no encontró ninguna evidencia que explique los alegados padecimientos, ni indicio de ataque o incidente alguno en territorio cubano.

El estudio tampoco reveló relación alguna entre los síntomas descritos y ataques sónicos o de otra índole, refiere el texto.

En ese sentido, precisó que el gobierno cubano respeta la decisión de Canadá, pero la considera carente de justificación.

Dijo también que la protección del personal diplomático de todos los países está garantizada en Cuba, nación estable y saludable para sus habitantes y los casi cinco millones de extranjeros que lo visitan cada año.

“Cuba continuará trabajando constructivamente con el Gobierno de Canadá, como hasta ahora, en estrecha comunicación por la vía diplomática y mediante la cooperación entre las agencias pertinentes de la aplicación de la Ley, a fin de encontrar explicaciones conclusivas sobre los padecimientos reportados”, explica el documento.

Con ese fin, reiteró la invitación a especialistas médicos de ambos Estados a intercambiar la información disponible sobre la base del más riguroso respeto a la privacidad de las personas afectadas.

El 17 de febrero del pasado año el Departamento de Estado y la Embajada de Estados Unidos en La Habana informaron por primera vez al Minrex y a la Embajada de Cuba en Washington la ocurrencia de tales incidentes entre noviembre de 2016 y el segundo mes de ese propio año.

Las autoridades estadounidenses fundamentaron que dichos ataques se produjeron con dispositivos sónicos de largo alcance que ocasionaron afectaciones a la salud de funcionarios de la sede diplomática y sus familiares.

Sin embargo, los especialistas aún no han podido dar certeramente con la tecnología que puede causar los síntomas que describen.

Por su parte las autoridades cubanas alegaron haber convocado a La Habana al Buró Federal de Investigaciones (FBI) para examinar los hechos, mientras se realizó una pesquisa que involucró a casi dos mil expertos de la isla, según fuentes oficiales.

FUENTE Prensa Latina