Muere un joven motociclista tras accidente en Santiago de Cuba

En imágenes difundidas en redes sociales se aprecia el trabajo de los agentes de criminalística en el lugar de los hechos. (Foto: Mario Yarisdel Gerpi Aldana-Facebook)

Un joven cubano murió el pasado domingo en Santiago de Cuba cuando la moto en la que viajaba cayó en un enorme bache en la calle Calvario, de la urbe oriental, tras no respetar las señalizaciones del tránsito y viajar a exceso de velocidad.

De acuerdo con Mario Yarisdel Gerpi Aldana, miembro del grupo de Facebook «ACCIDENTES BUSES & CAMIONES por más experiencia y menos víctimas!», el fallecido tenía solo 21 años de edad y no se percató de la advertencia vial que indicaba la presencia del bache.

En la imagen subida por el referido usuario se aprecia la presencia de agentes de criminalística en el lugar de los hechos.

Comentarios de residentes en Santiago de Cuba que también afirman ser testigos del incidente, indican que el fallecido estaba bajo los efectos de bebidas alcohólicas.

Los accidentes de tránsito son la quinta causa de muerte en Cuba y la primera entre los jóvenes (menores de 35 años). De acuerdo con cifras oficiales, en 2021 ocurrieron 8.369 en total, con 589 fallecidos y 5.859 lesionados.

El 70% de las provincias cubanas reportaron incrementos en este tipo de incidentes con relación al 2020. En ese sentido, en La Habana, Matanzas, Sancti Spíritus y Ciego de Ávila crecieron los indicadores de accidentalidad; mientras que Guantánamo fue el único territorio que registró una disminución.

Entre las principales causas que contribuyeron a la ocurrencia de los siniestros en las carreteras cubanas destacan la falta de atención al control del vehículo por parte de los conductores, quienes tampoco respetan el derecho de vía y violan los límites de velocidad diseñados por las autoridades del tránsito.

Los desperfectos técnicos y el mal estado de las vías también influyeron, pero en menor medida, según el reporte de la Comisión Nacional de Seguridad Vial (CNSV).

Por ejemplo, el 76.8% de los accidentes, el 80% de los fallecidos y el 78.1% de los lesionados, ocurrieron mientras los conductores manejaban bajo los efectos de la ingestión de bebidas alcohólicas.