Celia Cruz

Celia dejó un legado imborrable y continúa siendo una fuente de inspiración para las futuras generaciones de artistas latinos. (Captura de pantalla © Celia Cruz – YouTube)

La Reina de la Salsa, Celia Cruz, nacida el 21 de octubre de 1925 en La Habana, Cuba, y fallecida el 16 de julio de 2003 en Fort Lee, Nueva Jersey, Estados Unidos, dejó un impacto perdurable en la música latina. Conocida como “La Guarachera de Cuba”, Cruz es considerada una de las artistas más importantes y populares del siglo XX, así como un ícono de la música latina.

Celia Cruz inició su carrera en Cuba como vocalista del conjunto la Sonora Matancera, alcanzando reconocimiento y éxito durante los 15 años que estuvo activa. Tras abandonar su país natal en 1960, después de la Revolución cubana, se estableció en Estados Unidos, donde se convirtió en un símbolo de la comunidad cubana en el exilio. Desde entonces, continuó su carrera musical en México y Estados Unidos, especialmente en el género de la salsa, donde se destacó por su asociación con la Fania All Stars.

A lo largo de su carrera, Celia Cruz interpretó y popularizó diversos ritmos tropicales, como el son cubano, son montuno, guaguancó, la rumba, la guaracha y el bolero. Sin embargo, fue con la salsa que alcanzó fama internacional, fusionando el son cubano con otros estilos musicales.

Con un legado musical de 37 discos de estudio, Cruz recibió numerosos premios y reconocimientos, incluyendo dos Grammy y tres Grammy Latinos. Su impacto trascendió la música, incursionando también en el cine y la televisión.

Con su expresión característica “¡Azúcar!”, Celia Cruz se convirtió en un símbolo auténtico de la cultura latina, dejando un legado invaluable y siendo una fuente de inspiración para generaciones futuras. Su carisma, talento y estilo único la mantienen como un ícono perdurable de la música latina en todo el mundo.