Cuba espera crecer en mil millones las exportaciones: «es ambicioso, pero necesario» asegura Gil Fernández

Según Gil Fernández, para el régimen comunista es un “objetivo prioritario” controlar la inflación en la economía nacional. (Foto: Periódico Cubano)

El ministro de economía de Cuba, Alejandro Gil Fernández, reveló este fin de semana durante su intervención en la Comisión Económica de la Asamblea Nacional del Poder Popular que desde el nivel central se planifica un crecimiento de más de mil millones de dólares en exportaciones para 2023.

El criticado dirigente vuelve a apelar a su “pensamiento mágico” pues reconoce que la meta “es ambicioso, pero necesaria”. Las exportaciones de Cuba en 2022 rondarán poco más de 8.500 millones de dólares, por lo cual el plan de 9.755 millones de dólares de 2023 sin cambios en la actual situación de crisis económica resulta ante todo un deseo, más que una meta cumplible.

Sin embargo, de acuerdo con Prensa Latina, la proyección para el año que viene, si bien es “ambiciosa”, no superará a lo logrado en 2019, un año que se ha vuelto reiterativo como punto de comparación, pues es el periodo de 12 meses anterior a la llegada de la pandemia de coronavirus que trastocó la economía mundial, incluida la cubana.

Otro indicador proyectado por el también viceprimer ministro fue el relacionado con el arribo de turistas a la Isla. Gil Fernández mencionó que en 2023 llegarán a Cuba 3.5 millones de visitantes internacionales, un número que es casi el doble de los 1.7 millones que se esperan al final entre enero de 2022 y el presente mes de diciembre.

#Cuba🇨🇺 | Hoy se reunirán las comisiones permanentes de trabajo de la Asamblea Nacional del #PoderPopular.

Esta será la actividad previa al Décimo Período Ordinario de Sesiones de la @AsambleaCuba, que se realizará del 12 al 14 de diciembre de 2022#CubaLegisla pic.twitter.com/hITxiemQh3

— Asamblea Nacional Cuba (@AsambleaCuba) December 11, 2022

“Generar ingresos por la vía de la exportación es imprescindible”, indicó el ingeniero en explotación del transporte, que les recordó a los diputados que con motivo de la incapacidad del país para producir alimentos se “deben destinar más de 1.648 millones de dólares a anuales solo para garantizar la canasta básica de alimentos” que se entrega por la libreta de racionamiento.

Según Gil Fernández, para el régimen comunista es un “objetivo prioritario” controlar la inflación en la economía nacional. Sin embargo, fueron las propias decisiones de política monetaria del gobierno las que provocaron la situación actual.

La inflación “no es una causa, sino un efecto de la falta de disponibilidad de divisas que afronta el país, la disminución de la producción, del déficit de ofertas, y también la incidencia del robo y la especulación”.

El mal llamado “ordenamiento económico” provocó que cientos de empresas estatales cayeran en pérdidas y las producciones fueron al mínimo. La dolarización de la economía destruyó el salario de los cubanos que siguen cobrando en CUP, pero tienen que conseguir Moneda Libremente Convertible (MLC) para acceder a los pocos productos de primera necesidad.

Sobre el salario, el ministro descartó que no prevé una subida de este ni de las pensiones en los próximos meses.