Arquitectos e ingenieros cubanos exigen poder ejercer de forma independiente

Profesionales cubanos demostraron la necesidad de descentralizar su gremio (Foto: GECA -Facebook)

El Grupo de Estudios Cubanos de Arquitectura (GECA) solicitó al gobierno que permita el ejercicio profesional de los arquitectos e ingenieros de forma independiente en Cuba.

El reclamo del grupo está motivado por la reciente actualización a la legislación que rige el trabajo por cuenta propia (o trabajo privado) en el país.

Aunque aumentó la cantidad de actividades permitidas, muchas profesiones permanecen restringidas al ámbito estatal, sin posibilidad de un desarrollo independiente, por lo que actualmente se mantiene el estricto control estatal en los sectores estratégicos del país.

«Es cierto que la lista de actividades permitidas ha sido ampliada y ha beneficiado a muchos, pero la prohibición del ejercicio por cuenta propia de las actividades profesionales, científicas y técnicas constituye un obstáculo para los tiempos actuales, pues necesitamos de toda posibilidad de aporte al progreso y bienestar de nuestra nación», publicó el GECA en su cuenta en Facebook.

Los miembros del grupo aseguraron que Cuba necesita un equilibrio justo entre el sector estatal y el privado, que permita que las empresas del gobierno coexistan con todas las demás formas de gestión. La solicitud viene acompañada de varias propuestas concretas, que demuestran la necesidad de descentralizar el ejercicio de estas profesiones en Cuba.

«La creación de estas nuevas estructuras posibilitaría que se establecieran nexos entre Empresas Estatales y Arquitectos o Ingenieros independientes, pudiéndose crear entidades mixtas, encadenamientos entre grupos no estatales junto a Empresas para desarrollar proyectos complejos y la contratación de profesionales de reconocido prestigio para el desarrollo de partes de esos proyectos», propusieron.

El GECA resaltó que la legalización de estas profesiones significa una ganancia también para el gobierno, pues muchos trabajadores abandonan la isla en busca del desarrollo profesional que no encontraron en Cuba. La legalización del ejercicio de estas actividades de manera independiente permitiría una atractiva variedad de ofertas de empleo.

«Esto permitiría sumarnos a la exportación de servicios técnicos ampliando las posibilidades de participación de jóvenes profesionales y ayudando a nuestra economía. Por otra parte, el aumento del abanico de opciones a nuestros profesionales podría contribuir a mitigar el flujo de capital humano hacia otras latitudes», explicaron.

El grupo alertó que es necesario tomar medidas para llegar a las esferas sociales que el estado no alcanza, quedando desatendidas muchas de las necesidades de la población. Por lo tanto, el reclamo de estos profesionales es ante todo una urgencia de la propia sociedad.

«Conocemos la necesidad de aumentar las capacidades para satisfacer la creciente demanda de trabajo profesional. En este contexto, una certera vía constituye la descentralización de la arquitectura, atendiendo no sólo a los grandes proyectos, sino también a la arquitectura de pequeña escala que compone la ciudad. Desde los estudios independientes se pueden abordar tanto temáticas sociales como prácticas e investigaciones nacionales que permitan la sustitución de importaciones, buscando mayor equidad social y beneficios a grupos focales de imperiosa atención», fue la propuesta de este grupo de profesionales cubanos.