Reconocen trabas y demoras en acceso a comercio exterior de los trabajadores privados

El ministro de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca, no tuvo más remedio que reconocer que el plan “no marchan a buen ritmo”. (Foto: Minrex)

El gobierno cubano reconoció que en la implantación de sus políticas para impulsar el acceso al comercio de los trabajadores privados existen trabas y demoras, lo cual no permite avanzar al ritmo deseado. Las estadísticas oficiales así lo reflejan.

De acuerdo con un artículo del diario oficialista Granma, desde la entrada en vigor de las nuevas normativas que concentra el comercio exterior exclusivamente en entidades estatales, se han firmado 9.000 contratos de servicios de importación y exportación entre las empresas estatales y el sector privado.

La cifra no es suficiente para lo que demanda el país, pero además está muy desbalanceada. En el caso de la exportación -la vía que más hay que potenciar para captar divisas extranjeras- solo hay formalizados 170 contratos, por un valor de 12 millones de dólares. Es decir, la mayoría del sector privado accede al comercio exterior en busca de importar productos en lugar de exportar.

Las trabas y la prohibición de acceder al mercado exterior por sí mismos es una de las dificultades más imperiosas de los trabajadores por cuentapropia y las cooperativas cubanas. Aquellos que deseen importar o exportar bienes deben hacerlo a través de una empresa del Estado, de las muchas que han sido designadas por sectores, las cuales cobran comisión por esos servicios.

Muchos economistas han recomendado al gobierno que abandone la política de concentrar en las empresas estatales el monopolio del comercio exterior.

Tradicionalmente, la burocracia estatal frena en la realidad los planes que se trazan en papeles. El periódico Granma señala que desde que se aprobó esta nueva política, 58 empresas recibieron luz verde por el Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros para realizar funciones en el Comercio Exterior.

En la actualidad 21 de ellas no han firmado ningún contrato con el sector privado. De estas, 16 no han concluido los trámites necesarios para ejecutar esta función y cinco, aunque lo tienen todo listo, tampoco han logrado efectuar ninguna operación de comercio exterior.

Con esta realidad en frente de las narices, el ministro de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca, no tuvo más remedio que reconocer que el plan “no marchan a buen ritmo”. Sin embargo, hace un llamado a “agilizar trámites, revisar las normas vigentes y aprovechar mejor las reservas existentes”.

Si los resultados económicos se obtuvieran por “hacer llamados” y apelar a la arenga política, Cuba fuera una potencia, pero por más de 63 años el tiempo ha demostrado que el sistema no funciona. Aunque, de hecho, sí funciona, pero solo para unos pocos.