Restringen extracción de efectivo en cajeros automáticos para las Mipymes cubanas

En Sancti Spíritus, el Banco Popular de Ahorro tiene 11 cajeros automáticos, los cuales padecen obsolescencia tecnológica y sobreexplotación. (Foto: Periódico Cubano)

El sistema bancario en Cuba impondrá restricciones a la extracción de dinero en efectivo en cajeros automáticos para las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) del sector privado, pues ha identificado que sus movimientos son los responsables de que no haya suficiente disponibilidad de billetes en los cajeros.

De acuerdo con declaraciones al diario oficialista Escambray de Ladys Mora García, subdirectora del área contable en la Dirección Provincial del Banco de Crédito y Comercio (Bandec) en Sancti Spíritus, en los próximos días ocurrirá una decisión para limitar el retiro de efectivo.

“Nos informaron que con respecto al país se van a hacer, próximamente, algunas restricciones para limitar la extracción de tan altos volúmenes por estos segmentos particulares en los cajeros. Así les puede durar un poco más la disponibilidad de efectivo. Tenemos que tratar que permanezcan habilitados el mayor tiempo posible, que el dinero nos llegue en tiempo, sobre todo los billetes de altas denominaciones”, indicó la funcionaria.

Con el alza de la inflación se ha vuelto imprescindible cargar con más dinero para comprar las mismas cosas que se adquirían hace un año. La falta de efectivo aqueja a las bóvedas de los bancos y no es solo un problema de dificultades técnicas con los cajeros, o de la poca presencia de los mismos en el territorio nacional.

Mora García confesó que en Bandec “tenemos algunas dificultades con el efectivo, pero no para los cajeros automáticos. En su desabastecimiento también nos está golpeando la extracción de volúmenes altos por segmentos particulares como Mipymes, trabajadores por cuenta propia, fundamentalmente”.

Sin embargo, las propias autoridades reconocen que los ciudadanos que constituyen las Mipymes rehúyen a cobrar sus servicios o productos en transferencias electrónicas. “Tienen temor al control sobre sus finanzas, ya que ese dinero iría a su cuenta de operaciones y tendrían que tributar por allí”, explica el artículo de Escambray.

En el Banco Popular de Ahorro (BPA) del territorio espirituano dicen tener una alta disponibilidad de funcionamiento en sus cajeros, pero evidentemente no es suficiente para la demanda. En toda la provincia, el BPA tiene 11 cajeros automáticos, los cuales padecen obsolescencia tecnológica y sobreexplotación. Durante el 2022, soportaron cuatro millones de operaciones.

No obstante, María Efigenia Caballero, subdirectora de esa entidad, insiste en que en marzo la provincia mantuvo con servicio a los cajeros en un 88% del tiempo, una cifra que los ubicó “en el tercer lugar del país en este indicador, independientemente de los problemas que tenemos”.