Se sumerge Putin hasta donde se hundió un submarino soviético en 1942

El presidente ruso, Vladimir Putin realizó este sábado una inmersión en batiscafo en el mar Báltico, donde una mina alemana hundió el submarino soviético Shch-308 Siomga (tipo Shchunka) en octubre de 1942 con 40 tripulantes a bordo.

El batiscafo C-Explorer 3, que no era pilotado por el mandatario descendió a una profundidad de 50 metros. Durante la operación, que se prolongó por espacio de una hora, Putin observó como uno de los buceadores colocaba una placa conmemorativa en el lugar donde se hundió la nave.

El presidente ruso confesó después a los periodistas que la inmersión le dejó “impresiones vividas”, informó TASS.

“No es la primera vez que me sumerjo bajo el agua, por lo que las impresiones que me han dejado no son de la inmersión, sino, más bien, del objeto (los restos del submarino) que vimos”, afirmó Putin.

De igual forma, el líder ruso explicó que si se sumerge bajo el océano o realiza vuelos es “porque nuestra gente trabaja en todas partes: en el aire, bajo el agua, y bajo la tierra”. “Creo que debo visitar los lugares donde trabajan nuestros ciudadanos rusos, los especialistas y ver cómo lo hacen, para comprender mejor el valor de las cosas a las que muchos de ellos dedican sus vidas”, agregó el mandatario.

Cabe recordar que el año pasado, el presidente Vladimir Putin reveló en el documental “Putin” la causa por la que el 12 de agosto de 2000 se hundió el submarino Kursk en el mar de Barents, una de las páginas más trágicas de la historia reciente de la Armada rusa.

“Por qué guardarlo en secreto? (…) se ha podido determinar el porqué: una explosión en el compartimento de torpedos. Un incendio, seguido de la detonación de material militar. El casco del submarino prácticamente explotó” declaró en ese momento el mandatario ruso.

De acuerdo con Putin, después de la desintegración de la Unión Soviética, Rusia atravesó grandes problemas económicos, en el ámbito social y también en el Ejército. La tragedia ocurrida con el Kursk fue también una muestra de la situación general en la que se encontraban las Fuerzas Armadas del país.

El submarino Kursk, también conocido como K-141, naufragó en el mar de Barents a una profundidad de 108 metros con 118 tripulantes a bordo. Todos ellos murieron en la catástrofe.

Con información de RT y Sputnik