Televisión oficialista transmite carteles y gritos contra la dictadura en el Clásico Mundial de Béisbol

Múltiples pancartas fueron mostradas detrás del home plate del juego entre Cuba y Estados Unidos. (Captura de pantalla: MLB – YouTube)

La primera semifinal del V Clásico Mundial de Béisbol entre Estados Unidos y Cuba, en la ciudad de Miami, fue el escenario ideal para que el exilio cubano emprendiera todas las iniciativas posibles en aras de llevar el mensaje de libertad para la Isla y el rechazo a la dictadura.

El objetivo de los protestantes se cumplió, pues el canal oficialista Tele Rebelde se vio obligado a emitir la señal del juego, donde aparecieron continuas pancartas y gritos de “Viva Cuba Libre” y “Patria y Vida”.

Todo ello fue perfectamente audible en el sonido ambiente que llegaba a los televisores de los cubanos en el país caribeño, mientras los narradores de la televisión oficialista cumplían el guion calificando de “provocación” lo que estaba aconteciendo.

Esto es, sin dudas, el climax del juego de ayer, que #Cuba 🇨🇺 entera oyera al exilio en la voz de una de nuestras mujeres diciéndoles
“aquí estamos con y por ustedes”
“la libertad de la isla es la lucha de ambos”#Respect #PatriaYVida #CubaEsUnaDictadura pic.twitter.com/eWHo34Yu0u

— Daniel de Malas (@daniel_malas) March 20, 2023

El vicecanciller castrista, Carlos Fernández de Cossío, afirmó que Miami fue una “sede hostil” y que los peloteros cubanos lucharon el juego ante un equipo “técnicamente superior”, pero “bajo un hostigamiento canalla e incesante, tolerado por las autoridades del país y la ciudad sede”.

“El Team Asere peleó con hidalguía en el terreno, bajo asedio, presiones y desventajas a las que no se debe someter nunca a un equipo deportivo. La gusanera peleó y pataleó bajo la protección de la policía y las autoridades de Miami”, añadió el diplomático cubano en una clara contradicción a las declaraciones de los propios atletas, que en varias entrevistas confirmaron que ellos no se metían en política y su trabajo solo era jugar béisbol, por lo cual el ambiente alrededor del juego no los afectaba.

Nuestros peloteros luchando con dignidad cuesta arriba, contra un equipo técnicamente superior, en una sede hostil, bajo un hostigamiento canalla e incesante, tolerado por las autoridades del país y la ciudad sede. Merecen nuestro apoyo y reconocimiento. #Cuba #TeamAsere

— Carlos F. de Cossio (@CarlosFdeCossio) March 20, 2023

Con relación al aspecto deportivo, que pasó a un segundo plano, el equipo cubano se vio superado en toda la línea por EEUU, cuyos bateadores literalmente apalearon a cuanto pícher cubano se subió en el montículo del estadio LoganDeport en Miami.

Los estadounidenses hicieron 13 carreras en los primeros seis capítulos, apoyados en jonrones del torpedero Trea Turner (despachó dos) y el primera base Paul Goldschmidt.

Por el reglamento del torneo, en las etapas de cruces a partido único no aplicaba la regla del nocaut, por lo cual, la pesadilla para Cuba se extendió hasta la novena entrada, dando más tiempo para visibilizar las exigencias de libertad y el fin de la dictadura en Cuba que hicieron suyas la mayoría de las 35.779 personas que pagaron el boleto.