Tribunal ruso prohíbe todas las actividades de la organización de Navalny

Prohíben actividades de organización de Navalny en Rusia. (Navalny Instagram).

Un Tribunal de Moscú suspendió formalmente las actividades de la Fundación Anti-Corrupción (FBK), la organización del líder opositor Alexéi Navalny, así como de su red regional.

Según informó el periódico Deutsche Welle, este lunes 26 de junio se aprobó la medida cautelar, que había sido pedida por los fiscales en espera del fallo del tribunal sobre si se calificaría o no a la organización como “extremista”.

De ser calificada de esta forma por el tribunal, esto no solo implicaría la cancelación de toda actividad organizada por el colectivo, sino que se prohibiría su existencia en todo el territorio ruso y acarrearía severas penas de prisión para colaboradores y seguidores del opositor.

El aliado de Navalny, Leonid Volkov, explicó que durante la audiencia preliminar, los fiscales solicitaron que a los grupos de apoyo a Navalny se les prohibiera publicar cualquier coa en redes sociales, que se organizaran en protestas, e incluso, que participaran en las elecciones.

Todo lo anterior constituye, no solo una violación flagrante de la libertad de expresión, sino de los derechos básicos como ciudadanos de los involucrados.

La fiscalía rusa niega el descontento social causado por la mala administración del dirigente Vladimir Putin y acusa a estas organizaciones de buscar “crear las condiciones de la desestabilización de la situación social y sociopolítica” en Rusia, “encubriéndose en eslóganes liberales”.

Mientras tanto, la oficina del opositor en Moscú indicó a través de Telegram que ya no podía “trabajar bajo el viejo formato”, a raíz de esta decisión judicial.

“Sería demasiado peligroso para nuestros empleados y para nuestros seguidores”, afirmó, prometiendo que “continuarán a título personal luchando contra le corrupción, contra el partido en el poder Rusia Unida y contra el presidente Vladimir Putin”.

“No será fácil luchar, pero ganaremos de manera absoluta, porque somos muchos y somos fuertes”, señaló la oficina del opositor desde la capital rusa.

Al momento, Alemania fue el primer país en pronunciarse contra el veredicto del tribunal moscovita, reaccionando a través del portavoz de la Cancillería, Seteffen Seibert.

Seibert indicó que “usar contra las opiniones políticas no deseadas los instrumentos legales a base de terror no es de ninguna manera compatible con los principios del estado de derecho”.