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Moscas y un ataúd sin forro: Cubano explota por el maltrato de una funeraria al cuerpo de su tía
Expuesto, con moscas y en una caja de madera sin ninguna cobertura es como la funeraria mantenía el cuerpo de la fallecida
Un villaclareño denunció el pésimo trato que le dio una funeraria al cuerpo de su tía, dejando en evidencia la decadencia que afecta todos los aspectos de la realidad en Cuba.
Las carencias y austeridad que el Gobierno mantiene solo reservadas para sus ciudadanos, hacen que estos no encuentren descanso y condiciones dignas ni siquiera en la muerte, como dejó ver el lamentable caso ocurrido en la funeraria Las Villas, en Santa Clara.
El usuario Yunior Morales Pérez, denunció en su perfil de Facebook que la negocio estatal no solo utilizó un material sumamente sencillo para el cajón en el que su familiar sería enterrada, sino que no lo recubrieron ni un poco ni le dieron atención alguna al cuerpo, que dejaron expuesto.
“Mi madre se alteró mucho al llegar a la funeraria, entramos por detrás porque yo la llevaba en su sillón de ruedas y sin querer fuimos a dar a un pasillo en el que encontramos a un familiar nuestro mi tía Amada Morales Pérez puesta en una camilla sin privacidad, como si fuera cualquier cosa, moscas que se le posaban y lo más horrible… la caja en la que iban a poner su cuerpo”, escribió.
Morales adjuntó fotografías en las que se observa que lo que la funeraria pretendió hacer pasar por ataúd era solo una caja de madera similar a las que se usan para cargar verduras, incluso con manchas de moho y humedad, con salientes por dentro y llena de astillas.
Describió que sus familiares tuvieron que ir en ese momento por una sábana para ponerla en el cajón y que el cuerpo de su familiar no quedara en contacto directo con la madera.
“Mi mamá se rajó a gritos de dolor y desesperación al encontrarse con su hermana fallecida y la falta de respeto a toda la familia, sus hijos sumergidos en profundo dolor y aquella caja en pésimas condiciones”, añadió en su publicación.
Morales concluye cuestionando “¿qué somos?”, refiriéndose a la poca relevancia que tiene el pueblo cubano para sus gobernantes, que viven entre lujos y comodidades mientras la mayor parte de la población no puede siquiera aspirar a un funeral digno.