Una lección de honestidad en La Habana: chofer cubano devuelve celular olvidado en su vehículo

Edel dio una lección de honestidad al devolver un celular olvidado. (Foto: Neliys Pérez – Facebook)

Neliys Pérez Mulet, una abuela residente en La Habana, expresó en redes sociales su gratitud hacia un chofer privado que tuvo la decencia de devolver un celular olvidado en su unidad.

Según un breve relato de la ciudadana en el grupo de Facebook Managua, Frank País y Las Guasimas, el hecho ocurrió durante la mañana del pasado lunes, cuando a su nieto se le cayó el móvil en el vehículo y no se dio cuenta en ese momento.

Al percatarse del incidente tras descender de la unidad, se dirigió rápidamente a buscar el teléfono y, para su sorpresa, el conductor mostró amabilidad y gentileza al devolverlo. La cubana compartió imágenes del transportista en su publicación.

Pérez Mulet también expresó su reconocimiento y una profunda admiración hacia el hombre por su acto de honestidad. “Con mucho agradecimiento y educación reconozco este sentimiento humanitario de parte de este hombre, el cual me dejó sin palabras. Mucho agradecimiento y bendiciones para él y su familia gracias”, dijo.

Entre los comentarios del post, otro cubano identificó al chofer como Edel, y agradeció a la abuela por sus palabras positivas. Otro internauta agregó: “En este mundo quedan personas honestas y con buena enseñanza de los padres, bendiciones para ese conductor y mucha salud que Dios siempre lo va a recompensar”.

Esta interacción en redes sociales demuestra cómo los cubanos valoran y celebran los actos de decencia y solidaridad en su comunidad. No es la primera vez que un chofer cubano recibe reconocimiento por su acto de bondad. A mediados de junio, un conductor de transporte público se ganó los aplausos al ayudar a un anciano con limitaciones físicas y confusiones en la ruta de autobús.

Luis Enrique Hernández Pupo detuvo el ómnibus y, con extraordinaria humanidad, tomó de las manos al anciano para ayudarlo a descender. Pero su gesto no se quedó ahí, pues lo condujo hasta un lugar seguro, cruzando la vía y asegurándose de que estuviera en un entorno sin peligro. Esta hermosa y ejemplar acción de amor conmovió a los pasajeros y se convirtió en un testimonio inspirador de empatía y solidaridad en la sociedad cubana.

Estas historias de choferes comprometidos con el bienestar y la seguridad de los cubanos destacan la importancia de la honestidad y la decencia en la vida cotidiana. Son ejemplos que nos recuerdan la importancia de cuidar y apoyar a nuestra comunidad, y nos instan a reflexionar sobre cómo podemos marcar la diferencia en la vida de los demás.