Con estas 5 sugerencias puedes comprobar si consumes aceite de oliva de calidad

El aceite pasa por una serie de procesos que pueden traer como consecuencia la obtención de un producto que no es auténtico al 100%. (Captura de pantalla © GUILLE RODRÍGUEZ – YouTube)

El aceite de oliva es un aceite vegetal que se obtiene del prensado del fruto de la planta de olivo (la aceituna), el cual es ampliamente utilizado en la gastronomía por su suave sabor y por las múltiples propiedades que posee.

Sin embargo, desde el momento en el que se obtiene el aceite, hasta el momento en el que nosotros lo adquirimos en los estantes del supermercado, pasa por una serie de procesos que pueden traer como consecuencia la obtención de un producto que no es auténtico al 100%.

De esta manera lo afirma la directora de innovación culinaria de la productora italiana Bellucci, Susan Testa: “El fraude en el mercado del aceite de oliva ha estado presente por mucho tiempo”, «Se puede mezclar con otros tipos de aceite».

Razón por la cual la venta del mismo es regulada diversos organismos (entre ellos el Consejo de Oleícola Internacional), que se encargan de trabajar en pro de la venta de un auténtico producto que conserve sus propiedades y potencialidades características.

A pesar de los esfuerzos, este particular ha sido incluido en la lista de productos adulterados de la Comisión Europea; además la Agencia de Inspección Alimenticia de Canadá puso sobre aviso la presencia de malas cosechas de aceitunas que pueden traer como consecuencia un producto de calidad inferior.

De manera que para asegurar la autenticidad y calidad del producto que llevarás a tu hogar, Susana Romera (directora técnica de la Escuela Superior del Aceite de Oliva) te ofrece  5 sugerencias:

Paso 1: Verifica que el producto que te llevas no sólo diga “aceite de oliva”, sino que tenga los apellidos “extra» o «virgen”; de esta manera invertirás algo más de dinero, pero estarás seguro de que el aceite que llevas es de calidad superior, de lo contrario podría tratarse de una mezcla de aceites.

Paso 2: Observa si en la etiqueta aparece la fecha de la cosecha de las aceitunas; si este dato aparece quiere decir que la empresa que produjo el aceite es seria y, como es lógico pensar, mientras más reciente mejor es la calidad del producto.

Paso 3:  Fíjate qué tipo de aceitunas utilizaron para su realización, si la etiqueta indica monovarietal quiere decir que el aceite proviene de solo 1 variedad de aceituna, y si dice blend proviene de más de una.

Cualquiera de los dos casos está bien; lo relevante de este dato es que por medio de su presencia aseguras que la grasa fue obtenida propiamente de la oliva, y no de otro tipo de fuente.

Paso 4: El proceso de obtención del aceite lleva un costo determinado; si el producto que tienes frente a ti tiene un precio excesivamente bajo, deberías desconfiar de su autenticidad.

Paso 5: El aceite de oliva puro emana un olor característico y natural; si al abrir la botella de aceite el olor percibido es extraño o desagradable no es Auténtico.

Otro elemento que puede mejorar la calidad del producto es que se halle envasado en una botella oscura; pues de esta manera es capaz de conservar de mejor manera sus propiedades.

Ante los cambios climáticos que ha sufrido la región mediterránea en los últimos años, la producción de aceite de oliva ha disminuido considerablemente y sus precios se han elevado; razón por la cual el fraude del mismo se ha exacerbado por parte de las empresas productoras.

«El fraude en el mercado del aceite de oliva a nivel mundial es una realidad”, «En la medida que el consumidor final o la población desconoce la calidad de un producto, las empresas siempre intentarán venderte la mínima calidad al máximo precio»; fueron palabras de Romera en torno a la situación.