No hay aguacero ni coronavirus que detenga la necesidad en Pinar del Río

“No hay aguacero ni coronavirus que detenga la necesidad”: Graban cola durante diluvio en Pinar del Río. (Collage: Rolando Nápoles-Twitter)

La aguda escasez de alimentos en Cuba quedó en evidencia una vez más esta semana, cuando un video captó a cientos de vecinos del municipio San Juan y Martínez, en la occidental provincia de Pinar del Río, formador por horas bajo una lluvia torrencial en una cola para comprar pollo y aceite.

Las largas colas paras comprar alimentos, y específicamente carne de pollo, se han convertido en el ícono de la necesidad que abunda en la Isla, pues los cubanos no escapan a ellas ni siquiera en medio de una pandemia o del mal clima.

La escasez de cualquier tipo de carne, que ha convertido al pollo en la única fuente proteína de la Isla, lleva a sus habitantes a aguantar todo tipo de condiciones infrahumanas con tal de alcanzar un poco.

Esto ya que la alternativa a permanecer formado hasta 12 horas es no comer, pues los productos se agotan y solo alcanzan quienes hayan apartado su lugar en la fila, aunque esto no siempre es garantía, por lo que es mejor estar desde temprano y ser de los primeros.

En las imágenes que ya circulan en redes sociales se ve a los pobladores demasiado cerca entre sí, algo por lo que las colas siempre son un riesgo de contagio que, sin embargo, sigue sin ser atendido por las autoridades.

En San Juan y Martínez, Pinar del Río, no hay aguacero ni coronavirus que detenga la necesidad de los pobladores de hacer una cola para intentar comprar pollo y aceite. De:@RRepublicaCuba pic.twitter.com/jX1JmmuCcB

— Rolando Nápoles (@RNapoles) September 2, 2020

Aunque algunos se escondieron bajo terrazas, la mayoría solo se refugió bajo sus paraguas en medio de la carretera, donde no querían moverse ni siquiera porque un autobús quería pasar y tocó la bocina varias veces para que la gente se quitara.

Las imágenes despertaron reacciones inmediatas de indignación entre los usuarios, que lamentaron que la escasez en Cuba sea tan severa que orille a sus ciudadanos a aguantar esas condiciones.

También cuestionaron el refuerzo de las medidas de prevención, que incluso limitan aún más las posibilidades de adquirir comida, cuando al mismo tiempo no se hace nada para evitar este tipo de aglomeraciones.