NOTICIAS DE CUBA
¿Acto de repudio o terrorismo de Estado?
La casa de la activista Aynell Valdéz fue invadida y vandalizada
La violencia, el terror, la intimidación han escalado un nivel superior con los llamados “actos de repudio” en Cuba, esa manifestación tan medieval con la cual se intenta amedrentar a todo el que intente manifestarse contra el sistema totalitario impuesto desde hace más de seis décadas en la Isla.
En la mañana de este lunes, un grupo de personas cercó en su casa a la activista Anyell Valdés Cruz, quien se encontraba en compañía del Osmel Adrían Rubio, joven miembro del Movimiento San Isidro, luego de que ambos pintaran la pared de la vivienda con las frases “Patria y Vida”, “Abajo la dictadura”, “Díaz-Canel no te queremos”.
El objetivo de la turba, compuesta por profesores de la escuela primaria a donde asisten los hijos de Anyell e integrantes de los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) según denuncia la propia activista, era desalojarla de la casa donde vive junto a sus tres hijos y su madre, una mujer de la tercera edad, en el barrio Los Pinos, Arroyo Naranjo.
En esta ocasión en acto de repudio no se limitó a vociferar ofensas e improperios hacia los activistas, sino que recurrió a mecanismos explícitos de violencia de carácter ilegal, incluso dentro de las propias leyes cubanas.
Los integrantes del acto lanzaron petróleo a la casa. “Es un olor asfixiante”, denunció Adrián en un video transmitido en vivo, donde también se escucha el llanto desconsolado de los hijos de Anyell, asustados ante tal muestra de violencia.
Las cosas no quedaron ahí, pues varios de los participantes se atrevieron a irrumpir en el hogar y llenar de pintura las ventanas el piso y la pared donde se encontraban escritas las frases. La vandalización incluyó además que colocaran las frases de “Patria o Muerte” y “Viva Fidel”.
Uno de los momentos más escalofriantes fue cuando atacaron al perro de la familia, al inicio se pensó que había sido asesinado, pero luego felizmente se confirmó que en animal no había muerto.
La destacada animalista Beatriz Batista, que la semana pasada se reunió con autoridades del Ministerio de la Agricultura para exigir una Ley de Protección Animal, mostró su rechazo al acto y precisó que al parecer desmayaron al animalito con una sustancia para así entrar a la casa.
EL PERRITO ESTÁ VIVO. Todo indica que lo desmayaron con una sustancia para entrar en la casa de la familia.
#Justicia
#CubaContraElMaltratoAnimalPublicado por Beatriz Batista en Lunes, 22 de febrero de 2021
La también activista Anamelys Ramos igualmente exhibió su indignación en redes sociales: “Ya no es ni siquiera Patria o Muerte. Es la barbarie. Ácido, petróleo, niños llorando, cercas cruzadas para violar el espacio privado. ¡Criminales!”, expresó.
Llama la atención que previo al ataque alrededor de tres policías se encontraban custodiando el hogar, pero ninguno evitó lo que constituye a todas luces un acto sumamente ilegal tipificado en el Capítulo III, sección tercera del Código Penal cubano.
Los visto este 22 de febrero conllevaría a preguntarnos: ¿Atacar un hogar con niños y personas de la tercera edad en su interior puede considerarse un acto de repudio? ¿Estas son la muestras de “defensa revolucionaria”? ¿Aterrorizar a una familia con la complicidad de las fuerzas del orden no se debería llamar terrorismo de Estado?