Alrededor de 2,5 millones de inmigrantes en los EEUU podrían obtener la ciudadanía

Lindsey Graham, senador republicano y el demócrata Richard Durbin, este pasado martes presentaron un nuevo proyecto de ley que busca otorgarle la ciudadanía a parte de los jóvenes que se mantienen sin documentos y están acogidos bajo el programa de Acción Diferida (DACA).

“Estos jóvenes han vivido en los EEUU desde que eran niños y construyeron sus vidas aquí. Hay apoyo en todo el país para permitir que los ‘soñadores’ se queden, trabajen y alcancen todo su potencial”, indicó el senador republicano.

“No debemos desperdiciar el talento de estos jóvenes”, añadió.

La propuesta conocida con el nombre de “Dream Act 2019”, le daría la posibilidad a parte de estos jóvenes de poder establecerse en los EEUU de manera legal, aunque deben cumplir varios requisitos: como vivir en el país desde que eran niños, haber estudiado en una escuela secundaria y en la universidad, al servicio militar o haber estado laborando durante 3 años.

La Universidad de California del Sur (USC, por sus siglas en inglés), informó que alrededor de 2,5 millones de jóvenes indocumentados cumplen estos requisitos.

Desde la llegada del presidente Donald Trump, el estatus legal de estos jóvenes ha estado en constante debate, debido a que ordenó la terminación del programa DACA, promulgado por el anterior mandatario estadounidense Barack Obama (2009-2017).

Meses después, dos cortes federales bloquearon la suspensión de Trump, quedándose el programa en el aire.

El programa brinda la oportunidad de evitar la deportación y en algunos casos otorga el permiso de trabajo temporal, además la obtención de una licencia de conducir.

Donald Trump ha dicho en varias ocasiones que accedería a otorgarles protección a estos jóvenes indocumentados mientras el Congreso apruebe más fondos para la construcción del muro fronterizo con México, punto que los demócratas han refutado completamente.

En la Cámara Baja los demócratas presentaron en este mes una nueva versión de protección migratoria a estos jóvenes, ofreciéndole la oportunidad a la obtención de la ciudadanía a los titulares del Estatus de Protección Temporal (TPS) y el de Partida Forzada Diferida (DED).

La aprobación en la Cámara de Representantes, por parte de los demócratas estaría garantizada.

En el Senado, con mayoría republicana, se encuentra algo más complicado.

Con información de la Opinión