Autos estatales serán obligados a parar en los puntos de embarque

De acuerdo con las autoridades de la Empresa Provincial del Transporte en Matanzas, se trata de una medida tomada con “vistas a aliviar las limitaciones en el movimiento de los yumurinos”. (Foto referencial: Periódico Cubano)

Todos los autos con chapa estatal estarán obligados a parar en los puntos de embarque para contribuir a la movilidad de la población, según una información de la emisora Radio 26, que divulgó la decisión del gobierno provincial en Matanzas.

La medida siempre ha estado sobre la mesa del gobierno, pero se reactiva con cada crisis energética como la que se vive en la actualidad, donde hay escasez de vehículos de transporte masivo de pasajeros y falta de combustible.

“Acaba de ser aprobada la obligatoriedad de parada para los vehículos estatales en los puntos de embarque para ayudar a la transportación de la población ante la difícil situación de combustible”, señala la nota de prensa en el perfil de Facebook del citado medio.

De acuerdo con las autoridades de la Empresa Provincial del Transporte en Matanzas, se trata de una medida tomada con “vistas a aliviar las limitaciones en el movimiento de los yumurinos”.

Tal y como pasó en los años noventa, los puntos de recogida ubicados en entronques y zonas estratégicas de la occidental provincia tendrán inspectores (vestidos de azul o amarrillo). Estos agentes marcarán el alto a los vehículos de empresas estatales y entidades presupuestas para que lleven pasajeros de acuerdo a su recorrido.

En otros momentos de la historia reciente de Cuba, los choferes estatales que no paraban en los puntos de recogida eran circulados por los oficiales de transporte y la dirección del Partido Comunista se encargaba de presionar a los directivos para que sancionaran a su trabajador.

Los agentes vestidos de amarrillo o azul tienen la facultad de exigirle al chofer la hoja de ruta del vehículo, donde tiene que apuntar cuál es el origen y el destino de su viaje para no recibir una evasiva de parte del conductor.

Cuba es un país que no produce combustibles fósiles y depende de las importaciones de diésel y gasolina. Desde la llegada al poder de los gobiernos chavista, a Venezuela se ha mantenido dependiente de su petróleo, pero en situaciones de crisis tanto mundial como en la propia nación sudamericana el abasto tiene inestabilidad.

Por otra parte, la propia empresa estatal CIMEX, que controla la comercialización de combustible en Cuba, señaló que, debido a las roturas de las centrales termoeléctricas, los grupos electrónicos que consumen petróleo para generar electricidad han trabajado más horas. Por este exceso de consumo hay menos combustible para el parque automotor.