Bacteria carnívora podría aparecer en inundaciones provocadas por el huracán Milton

La bacteria Vibrio vulnificus podría proliferar en las aguas de inundación tras el paso del huracán. (Foto de referencia © Periódico Cubano)

El huracán Milton, que impactó la costa oeste de Florida en la noche de este miércoles, trae consigo lluvias fuertes, inundaciones devastadoras y también la posible presencia de una bacteria carnívora.

El Departamento de Salud de Florida hizo una advertencia urgente sobre los riesgos de infección por Vibrio vulnificus, una bacteria que podría proliferar en las aguas de inundación tras el paso del huracán.

Ese patógeno es especialmente peligroso para personas con cortes en la piel o sistemas inmunológicos debilitados, lo que convierte a las aguas de inundación en un foco de infección.

La Vibrio vulnificus puede causar infecciones graves que, de no tratarse a tiempo, podrían ser mortales. Para reducir las posibilidades de contagio, las autoridades han proporcionado varias recomendaciones. Entre ellas, se destaca evitar el contacto directo con aguas de inundación y lavar cualquier área del cuerpo expuesta con agua y jabón lo antes posible. Además, es esencial no consumir alimentos o bebidas que hayan estado en contacto con las aguas contaminadas.

En caso de que sea necesario consumir de estas fuentes, se recomienda hervirla durante al menos un minuto para eliminar cualquier patógeno potencial, como el mencionado.

Los expertos en salud pública han insistido en que la población tome estas advertencias en serio, ya que ignorarlas podría resultar en graves consecuencias para la salud. Esta bacteria es extremadamente peligrosa, y actuar con rapidez y precaución es esencial para evitar su propagación.

¿Cuáles efectos provoca la bacteria Vibrio vulnificus en el cuerpo humano?

Si una persona con una herida abierta o una lesión en la piel entra en contacto con agua contaminada con Vibrio vulnificus, puede desarrollarse una infección local severa. Esto puede llevar a hinchazón, enrojecimiento y dolor intenso en el área afectada. La bacteria puede destruir el tejido rápidamente, lo que provoca la necrosis (muerte del tejido), lo que le da su apodo de “bacteria carnívora”.

En casos en los que el germen ingresa al torrente sanguíneo, puede causar fiebre, escalofríos, hipotensión (presión arterial baja) y la formación de ampollas en la piel.

La septicemia por ese microorganismo tiene una alta tasa de mortalidad, especialmente en personas con condiciones de salud preexistentes, como enfermedades hepáticas crónicas, diabetes o sistemas inmunológicos debilitados.

La infección requiere tratamiento inmediato con antibióticos y, en algunos casos, cirugía para retirar el tejido muerto. En los casos más severos, puede ser necesaria la amputación de extremidades para detener la propagación de la infección.