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Baños sucios, sin agua y con basura: Las pésimas condiciones de un centro de aislamiento en Camagüey
Lo que debiera ser un espacio estéril y seguro para sospechosos de Covid-19, es un peligroso foco de contagio de varias enfermedades
Un cubano denunció las pésimas condiciones de higiene que mantiene el centro de aislamiento instalado en la Escuela Vocacional “Máximo Gómez” de Camagüey.
A través de una serie de fotografías que el lector hizo llegar a la redacción de Periódico Cubano, puede observarse la insalubridad que mantiene el centro, que en teoría debería mantenerse desinfectado todo el tiempo por seguridad de personal y pacientes.
Las violaciones a la sanidad en el centro de aislamiento son similares a las que se han denunciado múltiples ocasiones en hospitales y clínicas cubanas.
Las fallas van desde baños sucios, bolsas de basura abiertas y en el piso con varios desechos a su alrededor, pisos completamente sucios y manchados, así como muebles viejos y oxidados.
A esto se suman las condiciones de hacinamiento en las que conviven los pacientes, pues aunque se supone que son sospechosos de Covid-19, la cercanía que mantienen con otros pacientes en las áreas que comparten, principalmente las camas, los dejan vulnerables.
Así, en lugar de tratarse de un espacio estéril y seguro en el que los sospechosos puedan pasar una cuarentena y de encontrarse sanos irse a su casa, el lugar resulta un altísimo riesgo de contagio, en el que una persona sana fácilmente podría infectarse, no solo de Covid-19, sino incluso de otras enfermedades.
El hecho de que los baños de un lugar en el que convive gente enferma permanezcan completamente sucios sería una violación a la salubridad imperdonable en cualquier hospital de otro país, que llevaría a su clausura inmediata.
Si bien en este caso no se trata propiamente de una unidad médica, sí es un lugar que se supone fue habilitado por el gobierno para seguridad tanto de pacientes y sospechosos de coronavirus, como de sus familias, por lo que debería seguir las mismas medidas.
Las imágenes dejan ver además de la suciedad, la falta de mantenimiento, notable en el deterioro de instalaciones y mobiliario, como ventanas rotas, mosaicos faltantes en las paredes de los baños y la pintura raspada de las paredes.
También podría suponerse la falta de agua potable, pues varios de los lavamanos ni siquiera tienen llaves, y eso explicaría la suciedad de los inodoros.
Las malas condiciones de higiene y hacinamiento en los centros de aislamiento en Cuba han sido denunciadas constantemente desde el inicio de la pandemia, en marzo del 2020.
Quienes han estado internados también han descrito malos tratos y la pobreza de las raciones de alimentos, así como la falta de agua para beber.
Todas estas carencias incluso fueron padecidas por extranjeros, que el verano pasado pretendían vacacionar en Cuba. El caso más conocido fue el de una mujer rusa, que grabó un video llorando, explicando las malas condiciones del lugar al que fue enviada con su hijo menor de edad.