Cepeda y Sancti Spíritus revelan su “arma secreta folclórica” para avanzar en los play-offs

“Él vino con su buena vibra para acá y siempre lo que sea bueno y que aceptarlo”, dijo Cepeda sobre el Mambí. (Captura de Pantalla: Evyan Guerra-YouTube)

El equipo de Sancti Spíritus y su principal puntal a la ofensiva y ejemplo de consagración, el jugador Frederich Cepeda, revelaron ante las cámaras cuál es su “arma secreta folclórica” para avanzar a las semifinales de la pelota cubana por primera vez en 14 años.

Durante un breve reportaje del periodista deportivo Evyan Guerra, el jugador de 42 años mostró cómo “algo que no se ve habitualmente, pero que ocurre con más frecuencia de lo que pensamos en las Series Nacionales”.

Se trata de la participación en el equipo de un hombre llamado el Mambí, que practica religiones afrocubanas y, haciendo uso de su bastón, santigua a Cepeda y a los integrantes de los Gallos cada vez que salen al terreno.

El bateador ambidiestro calificó la acción de “folclórica” y aclaró que nunca había recibido este “tratamiento” en las anteriores Series Nacionales.

“Es un aficionado muy grande que tenemos nosotros acá de siempre el equipo espirituano y este año vino a darnos su buena energía. Hemos estado con él ahí apoyándonos. Nunca fue una costumbre esta práctica, es la primera vez que lo hago”, comentó el mítico número 24, que conquistó el liderato de los bateadores en la 61 SNB.

El equipo de Sancti Spíritus clasificó a los play-offs tras liderar la tabla general del campeonato, y en siete peleados juegos superó en la primera fase de cuartos de final a Pinar del Río, un conjunto que siempre le había jugado bien en esta etapa.

Ahora le toca enfrentarse en semifinales a Matanzas. Sobre el compromiso que inicia el 10 de junio, su manager Eriel Sánchez sostuvo que es “un avance de lo que dijimos todo el tiempo: que ningún equipo se parece a otro y que puede ser una nueva historia, la de los Gallos espirituanos”.

Muchos confían muy poco en el equipo del Yayabo por su larga historia de fracasos en las postemporadas. Por eso, el directivo afirma que prepara a sus muchachos para enfrentarse consigo mismos: “nuestro peor enemigo somos nosotros mismos”.

“Tendremos al frente un excelente equipo, con buenísimos peloteros, excelente dirección, mucha ofensiva, lanzadores de experiencia, pero nosotros tenemos también un excelente equipo, con excelentes peloteros y muchos deseos de hacer las cosas, que es lo más importante; cuando se tienen deseos y cada cual se entrega con el corazón, también vienen los resultados”, añadió.