Científicos de Cuba crean técnica para mejorar la producción de tabaco

Investigadores cubanos trabajan en el desarrollo de una técnica especial que permitiría mantener el color verde de las hojas de tabaco secas y aumentar el dulzor de las capas durante la producción de habanos de “poca fortaleza”.

Dicha innovación se da después de seis décadas de estudios similares, en especial en la provincia de Pinar del Río, donde se ubican las vegas de Vueltabajo, zona en la que se concentra cerca del 60% de la producción de la planta así como la producción del habano.

«El objetivo es lograr hojas que después del proceso de secado posean las características de finura y elasticidad típicas de cualquier capa con que se viste un habano, sin perder su color verde», explicó el director de la Estación Experimental de Tabaco de San Juan y Martínez, Nelson Rodríguez.

La técnica, evitaría que las plantas adquieran un tono marrón después del secado, al variar los parámetros de temperatura y humedad después de la cosecha además «requiere otros manejos específicos en la etapa agrícola».

Con ello, las hojas tratadas por medio de esta tecnología no pierden los azúcares, que normalmente serían eliminados mediante el procedimiento tradicional.

«Los especialistas consideran que es una capa más ligera. Por eso se utiliza en el torcido de tabacos de baja fortaleza, para las personas que se inician como fumadores, y ha estado ganando adeptos en los últimos tiempos», subrayó el especialista.

Rodríguez  explicó como la hoja verde y seca, característica del habano torcido, es consumida principalmente en Estados Unidos, pese a que «El actual Gobierno de ese país se empeña en obstaculizar cualquier acercamiento comercial con Cuba, y prohíbe la comercialización de los habanos […] La tecnología ya está disponible para cuando se necesite».

Actualmente, la industria tabaquera, es el cuarto sector con mayores ingresos para el producto interior bruto de Cuba, el cual alcanzó – por primera vez en su historia – los 500 millones de dólares en ventas, lo que supone un crecimiento del 12% interanual.

En el sector tabaquero, se cuentan con unos 200.000 trabajadores en la isla, cifra que sube a 250.000 en el periodo de cosechas.

De acuerdo a los promotores del tabaco cubano, la Isla cuenta con las condiciones de suelo, clima y experiencia de sus productores, necesarios para una producción de calidad.

Aunque ha alcanzado ganancias millonarias en 150 países, la compañía hispano-cubana Habanos no puede vender en Estados Unidos debido al embargo de Washington sobre Cuba. Esto afecta a la empresa ya que EEUU representa el mayor mercado a nivel mundial de tabaco, con dos tercios de la cuota global.

Con información de Diario Vasco