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Con ordenamiento, pero sin plan anual: así está la empresa estatal socialista
El periódico oficialista Invasor expone los vericuetos de la burocracia comunista
La implantación de la llamada tarea ordenamiento en Cuba cumplió sus primeros 3 meses de entrada en vigor, pero la empresa estatal socialista aún no tiene un plan anual ni el presupuesto definido según denunció el periódico oficialista Invasor que se escribe desde la central provincia de Ciego de Ávila.
Hasta el cierre de marzo en el territorio avileño faltaban 448 empresas por discutir su plan anual, un proceso asambleario donde los dirigentes locales –luego de recibir las orientaciones de sus superiores- le comunican a los trabajadores las aspiraciones productivas o de servicio de la empresa.
Roberto Pérez García, miembro del Secretariado Provincial de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), indicó que los atrasos más importantes se tienen en las empresas de Acueductos y Alcantarillado y en el sector de la construcción.
En cambio, los sectores de la economía que mejor avance muestran en relación a la confección de sus planes productivos son la Educación y el Turismo.
En aquellos lugares donde ya se han efectuado las reuniones de orientación los obreros reclamaron la imposibilidad de cumplir los planes orientados centralmente desde los ministerios en La Habana debido a la falta de recursos. Por ejemplo, los obreros del Transporte han expuesto la escasez de piezas de repuesto, baterías y neumáticos.
Por su parte, en las dependencias de Comercio, Gastronomía y Servicios se refieren a la falta de materia prima para elaborar productos que luego se tienen que vender a altos precios por lo cual han disminuido las ventas y se hace imposible alcanzar las metas de ingresos.
Taxistas en La Habana tienen el mismo problema con el ordenamiento
El aumento de precios por el ordenamiento monetario, del cual el propio gobierno alerto que haría caer en la quiebra a varias empresas estatales, afecta a los taxistas privados en La Habana a los cuales no les da “la cuenta”.
De acuerdo con un reportaje de CubaNet, los taxistas particulares de la capital no pueden costear el aumento de los precios de todos los productos con las bajas tarifas a las que han limitado sus servicios y que los han llevado prácticamente a la quiebra.
El pasado 7 de enero el Consejo de la Administración Provincial (CAP) de La Habana emitió la Resolución 240, que aumentó cinco pesos al precio máximo que pueden cobrar los taxistas independientes en las rutas de la ciudad, pero las piezas de repuesto para los autos las deben comprar en dólares.
