Turnos pintados en la mano, el nuevo “sistema” para ordenar las colas en Cuba

Las colas en Cuba no cesaron pese a la pandemia del coronavirus (Foto: Periódico Cubano)

Un número escrito en la piel es el nuevo “sistema” para ordenar las kilométricas colas y evitar aglomeraciones frente a las tiendas en Cuba, una situación que impera desde hace meses en el país a la hora de conseguir productos y alimentos básicos.

El medio independiente La Hora de Cuba publicó en su página de Facebook un texto firmado por Yunier Gutiérrez donde narra el nuevo método que supliría la entrega de tickets o el escaneo del carné de identidad en el barrio de Nuevo Vedado, La Habana.

Gutiérrez relató que al llegar a la avenida 26 vio a una gran cantidad de personas que empezaron a llegar desde la madrugada y no se movían pese a la lluvia. Se acercó a la cola del establecimiento El Viso, que antes de la pandemia tenía buenas ofertas, pero perdió credibilidad ante el desabastecimiento registrado en las últimas semanas.

Al formarse, un agente se acercó y con un bolígrafo marcó la mano derecha de Gutiérrez con el número 70 para luego gritar esta cifra hacia todos los presentes.

“Todos en la cola teníamos un número, era un dígito consecutivo para evitar intercalos en la fila. La iniciativa sin dudas es singular pero, para mi sorpresa, cada establecimiento tiene reservado un lugar diferente de nuestra anatomía para ser marcado”, comentó.

Agregó que en La Amistad, tienda de la cadena TRD ubicada en la esquina Zapata, estaban vendiendo productos de aseo personal y los interesados en comprar pasta dental eran marcados en la parte interior del brazo izquierdo.

Este sistema rudimentario se aplica luego de que el gobierno cubano intentó usar una aplicación a través de teléfonos móviles llamada Porter@, creada por la Universidad de Ciencias Informáticas (UCI).

La aplicación escaneaba el carné de identidad y el número de este documento quedaba guardado en una base de datos para garantizar que una persona pasara solo una vez a un determinado establecimiento.

Porter@ no funcionó como se esperaba porque muchos ciudadanos no tenían su identificación en tarjeta plástica.

Ante el fallo, se empezó usar al sistema de tickets hechos con cartones o recortes de papel impreso en el que se asignaba el número para hacer las compras.

“Regresar al hogar y poder mostrar los dígitos numéricos en tu cuerpo, será a partir de hoy una garantía para quienes duden de tu esfuerzo y tiempo dedicados a las largas filas. Ahora, mientras descanso en casa, me pregunto cuál será la próxima iniciativa en las colas de La Habana”, finalizó Gutiérrez.